Moriscos (Spanish: [moˈɾiskos], Catalan: [muˈɾiskus]; Portuguese: mouriscos [mo(w)ˈɾiʃkuʃ]; Spanish for Moorish) were former Muslims and their descendants whom the Roman Catholic church and the Spanish Crown obliged, under threat of death, to convert to Christianity after Spain outlawed the open practice of Islam by its sizeable Muslim population (termed mudéjar) in the early 16th century. The government distrusted Moriscos and between 1609 and 1614 began to expel them systematically from the various kingdoms of the united realm. The most severe expulsions occurred in the eastern Kingdom of Valencia. The exact number of Moriscos present in Spain prior to expulsion is unknown and can only be guessed on the basis of official records of the edict of expulsion. Furthermore, the overall success of the expulsion is subject to academic debate, with estimates on the proportion of those who avoided expulsion or returned to Spain ranging from 5% to 40%. The large majority of those permanently expelled settled on the western fringe of the Ottoman Empire and the Kingdom of Morocco. The last mass prosecution against Moriscos for crypto-Islamic practices occurred in Granada in 1727, with most of those convicted receiving relatively light sentences. In Spanish, morisco was also used in official colonial-era documentation in Spanish America to denote mixed-race castas, the children of relations between Spanish men and women of mixed African-European ancestry.
Los moriscos (palabra que deriva de moro) fueron los musulmanes del al-Ándalus bautizados tras la pragmática de conversión forzosa de los Reyes Católicos del 14 de febrero de 1502 en la Corona de Castilla, medida que las Cortes retrasaron en la Corona de Aragón hasta 1526. Tanto los convertidos con anterioridad al catolicismo de forma voluntaria como los convertidos obligatoriamente en adelante pasaron a ser denominados moriscos. Antes de la conversión forzada, a los musulmanes que vivían practicando de manera más o menos abierta su fe en los reinos cristianos, la historiografía los llama mudéjares, voz derivada del árabe mudajjan, es decir, \"tributarius\"; aunque en la época, esta denominación se refería sobre todo a los musulmanes del Reino de Castilla, ya que en Aragón se les llamaba simplemente moros y en Valencia y Cataluña, sarraí¯ns (sarracenos). Fueron numerosos en el Reino de Aragón y en el Reino de Valencia. En la Corona de Castilla, su número es más difícil de determinar, pues estaban altamente integrados en la sociedad y habían perdido muchos de sus rasgos diferenciadores. Su expulsión del reino fue decretada a principios del siglo XVII, y el esfuerzo por hacerlo duró varios años. Mientras que en la Corona de Aragón su expulsión fue implacable y recibió el apoyo de la comunidad cristiana, en Castilla hubo una gran resistencia entre la población y las autoridades, por lo que fue poco efectiva y hubo gran número de retornados. En Castilla la expulsión se centró sobre todo en los granadinos dispersados por el reino, que estaban menos integrados y eran vinculados a la rebelión de las Alpujarras. También se expulsó a los hornacheros de forma pactada, a los cuales se los transportó armados a Marruecos para formar la República de Salé.