Buscar: en esta colección | en esta obra
Obras completas de Menéndez... > HISTORIA DE LOS HETERODOXOS... > I : ESPAÑA ROMANA Y VISIGODA > NOTICIA DE ALGUNOS TRABAJOS RELATIVOS A HETERODOXOS ESPAÑOLES, Y PLAN DE UNA OBRA CRÍTICO-BIBLIOGRÁFICA SOBRE ESTA MATERIA

Datos del fragmento

Texto

CAPÍTULO PRIMERO

PRISCILIANO Y LOS PRISCILIANISTAS

Preliminares.—El Gnosticismo y los gnósticos .—Pasan a España estas doctrinas.—Marco.—Elpidio.—Agape.—El gnosticismo en Galicia.—Prisciliano.—Instancio y Salviano.—Opónense al priscilianismo Agidino, Obispo de Córdoba, e Idacio, metropolitano de Mérida.—Concilio de Zaragoza.—Caída de Agidino.—Prisciliano, Obispo de Ávila.—Provisiones del emperador Graciano.—Viaje de Prisciliano y sus secuaces a Roma.—Vuelta a España.— Persecuciones de Ithacio.—Concilio de Burdeos.—Condenación de los priscilianistas.—Apelan al Emperador.—Sentencia y suplicio de Prisciliano y otros herejes.—Destierro de Instancio.—Esfuerzos de S. Martín de Tours contra el celo fanático de los ithacianos.—Escritos de Prisciliano, perdidos: los cita S. Jerónimo.—Apología de Tiberiano Bético.—Obras de Dictínio, Obispo de Astorga.—Otros priscilianistas: Latroniano, Felicísimo, Aurelio y Asarino.—Juliano Armenio.—Fin del priscilianismo.—Su relación con doctrinas filosóficas anteriores.—Su representación en nuestra historia científica como anillo desprendido de la cadena de la Filosofía ibérica.—Enlace del priscilianismo con herejías y sistemas metafísicos anteriores.—¿Tenía alguna relación con los ritos célticos conservados en Galicia y otras regiones del Norte de España aun después de la propagación del cristianismo?

[p. 74] Apéndice al capítulo de Prisciliano .—Ithacio y la secta de los ithacianos .—Otras herejías que tuvieron secuaces en la España romana.—El falso Elías y el Obispo Rufo.—Los Donatistas y Lucila.—¿Fué español Vigilancio?

Fuentes: San Jerónimo, De viris illustribus , y la carta 75, núm. 3 de la clase 5.ª en la edición de Verona, 1734.—El Cronicón de San Próspero, incluído en el tomo VIII de la misma edición de San Jerónimo. Sulpicio Severo, en sus Diálogos y en la Historia Sacra. Honorio de Autun, De luminaribus Ecclesiae. Catálogo de las herejías, de Filastrio, etc. De Tiberiano habla San Jerónimo en el cap. 123 De viris illustribus , y de Dictinio el Papa San León en la epístola ad Turribium (tomo I, part. 2.ª de la edición de San Mauro), así como las actas del primer concilio toledano. Véase, además, la España Sagrada, las colecciones de concilios nacionales en que está el de Zaragoza, las generales de Labbé, Mansi, ecétera, en que aparece el de Burdeos; las historias eclesiásticas de España, y muchas otras en que, de propósito o por incidencia, se habla de priscilianistas e ithacianos. Hay un estudio especial muy curioso, el del presbítero urgelitano Girvés, impreso en Roma, 1750, con el título De secta Priscilianistarum dissertatio. En varios libros hay noticia de un Obispo Peregrino, contradictor de Prisciliano. Modernamente han hablado de éste y de su herejía D. Vicente de la Fuente en su Historia Eclesiástica de España; D. Manuel Murguía en la suya de Galicia, y otros autores.

Sobre Lucila, protectora de los donatistas, véanse las epístolas de San Agustín passim , así como el libro I de Optato Milevitano De schismate Donatistarum. La historia del falso Elías y del Obispo Rufo se halla en la vida de San Martín de Tours, que escribió Sulpicio Severo.

CAPÍTULO II

HEREJÍAS DE LA ÉPOCA VISIGODA

Consideraciones generales sobre el arrianismo en España.—Escasez de nombres propios y de monumentos literarios.—Atisbos de nestorianismo en España (431).—Quejas de Vital y Constancio.— [p. 75] El Maniqueísmo en Galicia y Extremadura.—Pacencio (448).—Reliquias del Priscilianismo.—Materialismo de un Obispo anónimo refutado por Liciniano.—Predicación de la herejía de los Acéfalos en Andalucía.—Es condenada en 619.—Impostura de un judío que logró engañar a Vincencio, Obispo de Ibiza.—Aclaraciones sobre Helvidio y Joviniano, refutados por San Ildefonso.—No fueron españoles ni contemporáneos del Santo.

Fuentes: Sobre el Nestorianismo, véase la carta de Vital y Constancio a San Capreolo, en las obras de Sirmond (Jacobo), París, 1696. Del maniqueo Pacencio, romano de nación, habla el Cronicón de Idacio.—Sobre Priscilianistas, véanse las actas de los Concilios, las cartas de San León, de los Obispos Vigilio y Montano, etc., etc. El nombre del Obispo materialista se ha perdido, y sólo tenemos noticia de sus heterodoxas opiniones por la brillante refutación de Liciniano y Severo, notable monumento de la filosofía ibérica. Por las actas del Concilio segundo de Sevilla tenemos noticia de la herejía de los Acéfalos, que predicó en España un Obispo sirio. La impostura del judío, forjador de varios libros que daba por sagrados, consta por una carta de Liciniano a Vicencio, Obispo de Ibiza.

CAPÍTULO III

ELIPANDO Y FÉLIX (EL ADOPCIONISMO)

Condiciones religiosas, sociales y políticas del primer siglo de la Reconquista. Conversión de un Sabeliano de Toledo.—El judío Sereno se titula Mesías , y, seguido de sus parciales, hace un viaje a la tierra de promisión.—Extravagancias y delirios de Migecio y Egilán.—Elipando refuta a Migecio.—Félix, Obispo de Urgel, y el mismo Elipando renuevan el nestorianismo .—Activa propaganda de esta doctrina.—Ascario, Obispo de Braga.—Escritos apologéticos de Theudula, metropolitano de Sevilla,—Ardiente oposición de Beato de Liébana y Eterio de Osma.— Liber Etherii adversus Elipandum, sive de adoptione Christi filii Dei : su análisis.—Propágase fuera de España la herejía.—Combátenla Paulino de Aquileya y Alcuino.—Es condenada en el Concilio de [p. 76] Ratisbona (792).—Abjura Félix y es absuelto.—Reincide en la herejía.—Nueva condenación por el Concilio de Francfort (794).—Probable sumisión de Elipando.—Persistencia de Félix.—Congreso teológico de Aquisgrán (799).—Abjura Félix de su error.— Profesión de fe que dirige a sus diocesanos.—Escritos de Elipando: Carta a Migecio .— Carta al abad Fidel .— Carta a Félix .—Consideraciones sobre esta herejía.

Fuentes: Los escritos apologéticos de Beato y Eterio en la Collectio maxima veterum patrum (Lug. 1677, tomo XIII), y en otras posteriores. Los siete libros de Alcuino contra Félix y los cuatro que escribió contra Elipando [1] .—Los tomos V y XI de la España Sagrada en que hay recogidos muy curiosos documentos relativos a esta herejía. La introducción del P. Flórez al célebre comentario de S. Beato al Apocalipsis, por primera vez impreso en 1770. Las colecciones generales de concilios, y casi todas nuestras historias eclesiásticas y civiles, etc. [2]

CAPÍTULO IV

HOSTEGESIS (EL ANTROPOMORFISMO)

Hostegesis, Obispo de Málaga.—Situación de los mozárabes cordobeses en el siglo IX.—Servando, opresor de los mozárabes.—Errores de su deudo Hostegesis.—Sostiene el antropomorfismo .—Es refutado por el abad Samson en su Apologético .—Persecuciones de Samson.—Fin de la herejía, gracias a los esfuerzos de Leovigildo.—Otras herejías de la época mozárabe.—Renace la secta de los Acéfalos.—Es condenada por un Concilio de Córdoba en 839.—Errores sobre la predestinación.—Carta del Papa Adriano acerca de este punto.—Espárcense doctrinas antitrinitarias y arrianas.—Álvaro Cordobés y el abad Spera-in-Deo las refutan.—Consideraciones generales sobre este período.

[p. 77] Fuentes: Sobre Hostegesis véase el Apologético del abad Samson, publicado en el tomo XI de la España Sagrada, donde están los escritos de otros santos varones cordobeses que dan noticia de las demás herejías mencionadas. Las epístolas del Papa Adriano a los Obispos de España pueden leerse en el tomo V de la España Sagrada .

CAPÍTULO V

UN ICONOCLASTA ESPAÑOL, Claudio de Turín

Mérito y saber grandes de Claudio.—Discípulo de Félix de Urgel.—Va a la corte de Ludovico Pío.—Es consagrado Obispo de Turín.—Renueva la herejía de los iconoclastas .—Controversia con el abad Teudemiro.—Apología de Claudio.—Refútala Teudemiro en el libro De imaginum cultu crucisque adoratione .—Otras impugnaciones del presbítero Dungalo y de Eginardo.—Escritos católicos de Claudio antes de su caída.—¿Pertenecen al escocés Claudio Clemente? Exposiciones de la Escritura que realmente pueden atribuirse a nuestro Obispo de Turín.—Discusión bibliográfica.—¿Hay fundamento para suponer arriano a Claudio?

Fuentes: Acerca de Claudio hay muchas noticias en los Anales de Baronio (tomo IX), en la Italia Sacra (tomo IV), en Labbé De Scriptoribus ecclesisticis, en Nicolás Antonio Bibliotheca Vetus, y en la Historia Literaria de Francia de los Maurinos.

CAPÍTULO VI

VINDICACIÓN DE Prudencio Galindo

Prudencio Galindo, Obispo de Troyes.—Su ciencia.—Controversias sobre la predestinación.—Doctrina de Godescalco.—Errores y falsedades de Hincmaro de Reims.—Ortodoxia de Prudencio.—Refuta a Scoto Erígena.—Escritos polémicos y dogmáticos de Prudencio.—Otras obras suyas.—Consideraciones generales sobre los sabios españoles que brillaron en las Galias durante la dominación carolingia.

[p. 78] Fuentes: Hincmaro y el autor de los Anales Bertinianos fueron los primeros en suponer hereje a Prudencio.—Gilberto Maguino en sus Vindiciae de Praedestinatione , y N. Antonio, siguiéndole, vindicaron ampliamente a Galindo. Casi todas las noticias relativas a éste se hallan recopiladas en el tomo V de la Historia literaria de Francia, cuyos autores escriben de nuestro Obispo lo bastante para llenar un volumen en 8.º

CAPÍTULO VII

Arnaldo de Vilanova.—Gonzalo de Cuenca.—Raimundo de Tárrega

A) Verdadera patria de Arnaldo: Vilanova en Cataluña.—Discusión sobre este punto.—Grandes conocimientos médicos de Arnaldo.—Sus viajes y estudios.—Sus extrañas opiniones sobre el día del Juicio y la venida del Anticristo.—Son condenadas por Clemente V en Aviñón.—Huye Arnaldo a Sicilia.—Sostiene, entre otros errores, la teoría de la generación espontánea.—Escritos médicos de Arnaldo: noticias bibliográficas.—Idem sobre los escritos alquímicos.—Obras teológicas, muchas de ellas perdidas.—De mysterio cimbalorum.—De adventu Antichristi.—De rebus ecclesiasticis.—Comentario al Apocalipsis.—De perversitate pseudotheologorum.

B) Gonzalo de Cuenca.—Su libro Virginale, dedicado a Nicolás dé Calabria.—Condenación de sus doctrinas, y persecución del maestro y de uno de sus discípulos.

C) Defensa de Raimundo Lulio.—¿Se hallan en sus libros las proposiciones heréticas registradas en Eymerich?—Pertenecen a Raimundo de Tárraga.—Noticias de este heterodoxo catalán.—Su conversión del judaísmo.—Se hace dominico.—Su largo proceso.—Su prisión en el convento de Santo Domingo de Barcelona.—Sus libros De secretis naturae, De alchimia, De invocatione doemonum, condenados por Gregorio XI.—Muerte misteriosa de Raimundo.

Fuentes: Para Arnaldo de Vilanova, meramente considerado como heresiarca, Gonzalo de Cuenca y R. de Tárraga hay noticias en el Directorium inquisitorum de Eymerich. De Arnaldo hablan [p. 79] largamente todos los historiadores y blbliógrafos de la Medicina y de la Alquimia. Sobre su verdadera patria han publicado investigaciones en la Revista Histórica Latina de Barcelona los señores D. Manuel Milá y Fontanals, D. Antonio de Bofarull y D. José R. de Luanco. De la herejía de Arnaldo trata también el abate Andrés en sus Cartas familiares, tomo III, apuntando algunas especies curiosas. En todas las ediciones de Arnaldo faltan los tratados teológicos. De Gonzalo de Cuenca dejó inédita una breve biografía el Excmo. Sr. D. Fermín Caballero.

CAPÍTULO VIII

Pedro de Osma

Pedro de Osma.—Sus estudios y enseñanzas en la Universidad Salmantina.—Colegial de San Bartolomé.—Canónigo.—Su libro De confessione .—Es condenado en el Sínodo de Alcalá convocado por el Arzobispo Carrillo en 1479.—Índice de las proposiciones allí reprobadas.—Abjura de ellas.—Escritos de Pedro de Osma.—Comentarios a la Ética y a la Metafísica de Aristóteles.— De comparatione deitatis, propietatis et personae disputatio seu repetitio .—Trabajos escriturarios de Pedro de Osma.—Su Expositio Symboli .—Impugnación del tratado De confessione hecha por el maestro Pedro Ximénez Préxamo.

Fuentes: La Summa conciliorum del Arzobispo Carranza, varias veces impresa (la primera en Salamanca, 1541, por Andrea de Portonariis). Allí se inserta la bula del Papa Sixto IV que confirma la decisión de la junta consultiva (llamada Sínodo por Melchor Cano), convocada en Alcalá por el Arzobispo Carrillo.

Lucero de la vida cristiana, por Pedro Ximénez Préxamo.

Historia del colegio viejo de San Bartolomé de Salamanca, por el marqués de Alventos.

Biblioteca de escritores que han sido individuos de los colegios mayores, por Rezábal y Ugarte.

Diversas historias eclasiásticas y otros libros muy comunes.

[p. 80] CAPÍTULO IX

EL PROTESTANTISMO EN ESPAÑA EN EL SIGLO XVI

Alfonso de Valdés

A) Precedentes.—Primeras tentativas de reforma en España.—Reformadores templados.— Los erasmistas españoles .—Ediciones y traducciones de los escritos de Erasmo.—Controversias a que dieron lugar tales libros.—Defensores de Erasmo (D. Alonso Manrique, D. Alonso de Fonseca, Luis Núñez Coronel, fray Alonso de Virués, Juan de Vergara, el arcediano de Alcor).—Ortodoxia de todos estos personajes.—Adversarios de Erasmo (Diego López de Stúñiga, fray Luis Carvajal y Juan Ginés de Sepúlveda).—Conferencias teológicas de Valladolid.—Sucesos posteriores.

B) Alfonso de Valdés, principal erasmista español.—Su vida.—Cargos que desempeña en servicio del emperador Carlos V.—Su primer viaje a Alemania.—Juicio que formó de los comienzos del luteranismo.—Sus cartas a Pedro Mártir.—Llega a ser secretario del emperador.—Redacta los documentos latinos.—Observaciones sobre el texto de las cartas a Clemente VII y al Colegio de Cardenales, solicitando la celebración de un Concilio general.—Defiende Alfonso de Valdés a Carlos V, en orden al saqueo de Roma en 1527.—Cuestión de Alfonso con el Nuncio Castiglione.—Segundo viaje a Alemania.—Conferencias de Alfonso de Valdés con Melancton.— La confesión de Ausburgo .—Muerte de Alfonso de Valdés en Viena (1532).—Opiniones religiosas de Alfonso.—Noticia de sus pnncipales documentos diplomáticos.—Idem de sus obras literarias.—El Diálogo de Lactancio y un arcediano sobre el saco de Roma, escrito por él y corregido por su hermano.—Relaciones de Alfonso con Erasmo, Sepúlveda y otros humanistas.—Su representación en el cuadro del Renacimiento.

Fuentes: Erasmus in Spanien, artículo publicado por el doctor Bohemer en el Jahrbuch für romanische... Litterature .—Obras de Erasmo (ediciones de Froben y Le Clerc).— Obras de Sepúlveda (edición de la Academia de la Historia).— Reformistas Españoles, de Usoz.— Spanish Reformers, del doctor Boehmer.— Alfonso y [p. 81] Juan de Valdés, por D. Fermín Caballero, etc., etc., y todos los libros, artículos y memorias que más o menos directamente se refieren a la historia de la Reforma en España.

CAPÍTULO X

EL PROTESTANTISMO EN ESPAÑA EN EL SIGLO XVI

Juan de Valdés

Consideraciones preliminares.—Noticias biográficas de Juan de Valdés.—Sale de España a consecuencia de sus primeros escritos.—Se establece en Nápoles.—Sus predicaciones en aquella ciudad.—Noticia de sus principales discípulos y secuaces (Carnesechi, Ochino, Pedro Mártir, Vermiglio, Julia Gonzaga, Victoria Colonna, etcétera).—Reseña de los progresos de la Reforma en Italia.—Nacimiento, progresos y fin de la secta valdesiana.—Obras de Juan de Valdés.—Primer período de su vida literaria.— Diálogo de Mercurio y Carón .— Diálogo de la lengua .—Influencia que en el género y estilo de estos libros ejercieron los diálogos de Luciano y los Coloquios de Erasmo.—Segundo período, más teológico y dogmático que el primero.— Comentarios a las epístolas de San Pablo, Consideraciones divinas, Alfabeto cristiano .—Otros tratados originales.—Traducciones de la Escritura.—Significación religiosa de Valdés como heresiarca y fundador de secta.—No fué luterano.—Dogmatizó libremente.—¿Fué antitrinitario?—Exposición de su sistema teológico.—Idem de sus doctrinas filosóficas.—Extremado misticismo de Valdés.—Gran valor literario de sus obras.—Fué el primer prosista del reinado de Carlos V.—Notables semejanzas que tiene el estilo de sus primeros tratados con el de Cervantes.—Alto mérito de su prosa mística.

Fuentes: Biógrafos de Valdés: Sand (Bibliotheca antitrinitariorum); Bayle, Dictionaire historique; Pidal, De Juan de Valdés y si fué autor del Diálogo de las lenguas; Usoz, Wiffen, Bohemer, Cenni biographici y Spanish Reformers; D. Fermín Caballero, etcétera.

Sus obras se hallan en los tomos IV, IX, X, XI, XV, XVI [p. 82] y XVIII de la colección de Reformistas de Usoz. A ellos debe agregarse otro tomo impreso por separado que contiene el Diálogo de la lengua. De sus discípulos italianos hay noticias en el proceso de Carnesechi, en la obra de M'Crie y en todas las relativas a la Reforma en Italia.

CAPÍTULO XI

EL PROTESTANTISMO EN ESPAÑA EN EL SIGLO XVI.—LUTERANISMO.— Francisco y Jaime de Enzinas .— Francisco de San Román .— El Dr. Juan Díaz.

A) Francisco de Enzinas.—Noticias biográficas.—Sus relaciones con el abad de Compluto Pedro de Lerma, sospechoso de heterodoxia.—Datos acerca de este personaje.—Estudios de Enzinas en Lovaina.—¿Fué discípulo de Luis Vives?—Sus relaciones con Melancton.—Traduce Enzinas del griego el Nuevo Testamento .—Controversias con los teólogos flamencos.—Prisión de Enzinas en Bruselas.—Su fuga a Alemania.—Aprecio que le profesaba Melancton.—Viaje de Enzinas a Inglaterra.—Carta de Melancton a Crammer.—Enzinas, catedrático de griego en Cambridge.—Su vuelta a Alemania.—Reside después ora en Basilea, ora en Strasburgo.—Surte de traducciones de clásicos las prensas de Agustín Frisio y de Arnoldo Byrcman.—Su viaje a Ginebra en 1552.—Relaciones con Calvino.—Muere Enzinas el mismo año en Strasburgo.—Sus doctrinas religiosas.—Su importancia como helenista.—Sus obras originales y traducidas.—Las Memorias de sus persecuciones y cautividad dedicadas a Melancton.—La traducción del Nuevo Testamento .—Idem de los Psalmos penitenciales .— Breve y compendiosa institución de la religión christiana, extractada de Calvino.—Traducción del tratado De libertate christiana, de Lutero.—Versión de la Antítesis, de Melancton;— Historia de la muerte de Juan Díaz .—Otros libros heréticos que trabajó en parte.—Su voluminosa correspondencia.—Escritos puramente literarios.—Traslación de las Vidas Paralelas, de Plutarco: parte que en élla tuvo el secretario Diego Gracián.—Idem de los Diálogos e Historia Verdadera, de Luciano.—Idem de un idilio, de Mosco.— [p. 83] Idem de Floro y de algunos libros de las décadas, de Tito Livio. Cuestiones bibliográficas.

B) Jaime de Enzinas.—Sus viajes a Flandes y Alemania.—Sigue, como su hermano, el luteranismo.—Dogmatiza en Roma.—Es condenado a las llamas en 1545.—Su traducción de un Catecismo.

C) Francisco de San Román, tercer hereje burgalés.—Sus viajes a Lovaina y Brema.—Su prisión.—Es quemado vivo en Valladolid.—Su Catecismo y otras obras, todas desconocidas.

D) El Dr. Juan Díaz, tercer hereje conquense.—Sus estudios en la Universidad de París.—Su viaje a Roma.—Es discípulo de Jaime de Enzinas.—Trata en Ginebra a Calvino y en Neoburg a Bucero.—Va como teólogo a la dieta de Ratisbona.—Asesínale allí su hermano Alonso.—Datos y pormenores sobre esta muerte.—Única obra de Juan Díaz, la Summa christianae religionis.

Fuentes: Memoires de Francisco de Enzinas, texte latin inedit, etcétera Bruxelles, 1863. Bibliotheca Wiffeniana de Boehmer, etc. De Enzinas, sólo reimprimió Usoz las dos informaciones: las demás obras suyas se imprimieron casi todas anónimas, y se han hecho muy raras. Exigen detenido estudio.—Lo poco que se sabe de Jaime de Enzinas y Francisco de San Román está recogido en el libro de Boehmer.—Al mismo, a las obras de Sepúlveda, y al tomo XX de la colección de Usoz, en que están la Historia de la muerte de... y la Summa christianae religionis, debemos acudir por lo tocante a Juan Díaz. Aun nos prometemos más amplias noticias del libro inédito de D. Fermín Caballero.

CAPÍTULO XII

EL LUTERANISMO EN VALLADOLID.— Cazalla

A) Propagación de las doctrinas heréticas en nuestro suelo.—Principales focos de luteranismo.—Valladolid, Sevilla.—Protestantes vallisoletanos.—El Dr. Cazalla y su madre Doña Leonor de Vibero.—Cazalla, capellán del Emperador.—Le acompaña en sus viajes.—Su fama como predicador.—Vuelto a España, intenta derramar las nuevas doctrinas.—Conciliábulos de Valladolid.— [p. 84] Nombres y noticias de los principales discípulos y secuaces de Cazalla.—Auto de Fe de 21 de mayo de 1555 en que perecieron catorce personas y fueron reconciliadas diez y seis.—Detalles sobre la muerte del Dr. Cazalla y otros miembros de su familia.—Perece en las llamas el bachiller Herrezuelo, dogmatizador en Toro.—Segundo Auto de Valladolid en 8 de octubre de 1559.—D. Carlos de Sessé y Fr. Domingo de Rojas. Consideraciones generales sobre estos rigores.—Evidente exageración que ha habido en este punto.

B) Única e importantísima obra atribuída a la Congregación luterana de Valladolid.— El Crótalon de Christophoro Gnophoso .—Su gran mérito como obra literaria.—Imitación de los diálogos de Luciano.—Sus relaciones con los escritos de Valdés y Enzinas. Análisis y juicio de El Crótalon.

Fuentes: Varias relaciones manuscritas de Autos de Fe .—Noticias del Dr. Cazalla por Fr. Antonio de La Carrera (R. 29 de la Biblioteca Nacional), Llorente, Puigblanch, Adolfo de Castro, etcétera. El Crótalon, obra desconocida para Usoz, ha sido impresa por la Sociedad de bibliófilos españoles .

CAPÍTULO XIII

EL LUTERANISMO EN SEVILLA

A) Rodrigo de Valero .—Sus predicaciones.—Supónese inspirado.—Benignidad con que le trató la Inquisición.

B) El Dr. Juan Gil o Egidio .—Sus estudios en Alcalá.—Canónigo magistral de Sevilla.—Discípulo de Valero.—Es propuesto para el Obispado de Tortosa.—Proceso del Dr. Egidio.—Sus controversias con Fr. Domingo de Soto.—Abjura de sus doctrinas.—Sentencia del Santo Oficio.—Noticia de las obras del Dr. Egidio.—Reincide en la herejía.—Muere en 1556;—Es quemado en estatua el 22 de diciembre de 1560.

C) El Dr. Juan Pérez de Pineda .—Noticias biográficas.—Comisiones diplomáticas en que anduvo ocupado.—Su amistad con los hermanos Valdés.—Publica en Venecia los Comentarios de Juan a las Epístolas de S. Pablo .—Traduce el Nuevo Testamento [p. 85] y los Psalmos .—Sus obras originales: la Epístola consolatoria, el Breve compendio de doctrina utilísimo para todo christiano, la Imagen del Antichristo, el Breve sumario de indulgencias .—Pormenores bibliográficos.—Análisis de tales libros.

D) Julián Hernández (Julian le Petit) difunde en Sevilla los libros del Dr. Juan Pérez.—Proceso de Julián Hernández.—Muere en el Auto de Fe de 22 de diciembre de 1560.—Difúndese la herética doctrina entre los monjes de San Isidro del Campo.

Fuentes: Reinaldo G. Montano, Cipriano de Valera (Tratado del Papa), relaciones manuscritas de Autos de Fe, Llorente, A. de Castro, etc. Las obras del Dr. Juan Pérez están casi todas en los tomos II, III, VII, XII y XVII de los Reformistas de Usoz.

CAPÍTULO XIV

EL LUTERANISMO EN SEVILLA.—(Continuación)

A) El Dr. Constantino Ponce de la Fuente .—Noticias biográficas.—Predicador de Carlos V.—Magistral de Sevilla.—Amigo del Dr. Egidio.—Sospechas de San Francisco de Borja.—Sucesos posteriores.—Prisión del Dr. Constantino.—Pormenores de su proceso y suicidio.—Obras de Constantino .— Suma de doctrina christiana .— Sermón del Monte .— Confesión del pecador .—Varios trabajos escriturarios.—Análisis de los libros citados.—Mérito de Constantino como escritor ascético.—Pormenores bibliográficos.

B) D. Juan Ponce de León, el predicador Juan González, Fernando de San Juan, el Dr. Cristóbal de Losada, Isabel de Baene, el Mtro. Blanco (Garci Arias) , y otros protestantes de menor importancia.—Detalles sobre los Autos de Fe de 24 de septiembre de 1559 y 22 de diciembre de 1560.—Fin del luteranismo en Sevilla.—El luteranismo en otras ciudades de España.

Fuentes: Reinaldo G. Montano, Cipriano de Valera, Llorente, A. de Castro, etc., etc.—Obras del Dr. Constantino en el tomo XIX de la colección de Usoz. Dejó inédita una extensa biografía de Constantino el Sr. D. Fermín Caballero.

[p. 86] CAPÍTULO XV

PROTESTANTES ESPAÑOLES EN TIERRAS EXTRAÑAS.—Calvinistas.— Casiodoro de Reina .— Cipriano de Valera

A) Casiodoro de Reina.—Noticias biográficas.—Su residencia en Londres y Basilea.—Sus trabajos escriturarios.—Su traducción de la Biblia .—Consideraciones sobre esta obra.—Pormenores bibliográficos.

B) Cipriano de Valera.—Su residencia en Londres y en Ginebra.—Sus numerosas obras.—Análisis y juicio de las más notables.— Los dos tratados del Papa y de la Misa .— Institución cristiana de Calvino .— Tratado para los cautivos de Berbería .— El Católico Reformado .— Aviso sobre la indicción del jubileo .—Reimpresión y enmienda de la Biblia de Casiodoro de Reina.—Publicación separada del Nuevo Testamento. Erudición de Valera.—Facilidad con que manejaba la lengua castellana.—Datos bibliográficos.

Fuentes: La Biblia de Casiodoro.—Las obras de Valera, reimpresas casi todas en los tomos VI, VIII y XI de la colección de Reformistas .—La Biblioteca de traductores de Pellizer y la manuscrita del que esto escribe, las obras de Ricardo Simón, M'Crie, Llorente, A. de Castro, etc., etc.

CAPÍTULO XVI

PROTESTANTES ESPAÑOLES EN TIERRAS EXTRAÑAS

A) Juan Nicolás Sacharles .—Análisis de su autobiografía rotulada El Espanol Reformado .

B) Reinaldo G. Montano .—¿Encubre este pseudónimo el nombre de uno o de dos protestantes sevillanos?—Estudio del célebre libro publicado en Heidelberg, con el título de Inquisitionis Hispanicae artes aliquot detectae et palam productae .

C) Fernando de Tejeda .—Noticias bibliográficas.—Análisis del Carrascón .—Su mérito literario.—Otros libros de Tejeda.

[p. 87] D) Noticia de varios libros anónimos ( catecismos, confesiones, etc.), o de escasa importancia dados a luz por heterodoxos españoles.— Antonio del Corro .—Su carta a Casiodoro de Reina.

Fuentes: Los tomos VIII, V, XIII y I de los Reformistas de Usoz, etc., etc.

CAPÍTULO XVII

PROTESTANTES ESPAÑOLES EN TIERRAS EXTRAÑAS. (Conclusión).—

SIGLOS XVII Y XVIII

A) El intérprete Juan de Luna .—Sus obras literarias.—Diálogos.—Continuación del Lazarillo de Tormes.

B) ¿Fué protestante Miguel de Montserrat ?—Noticia de sus escritos, en especial del intitulado In coena Domini.— Investigaciones sobre el libro Misericordias David fideles (1645).

C) Melchor Román .—Su opúsculo autobiográfico.

D) Jaime Salgado .—Su Description of the Plaza de Madrid and the bull-balting. (1683).—Otras obras suyas.

E) Aventrot, flamenco.—Traductor al castellano del Catecismo de Heidelberg.

F) Seravia y Gavin, clérigos de la iglesia anglicana.

G) Félix A. de Alvarado, anglicano.—Traductor de la Apología de Barclay.—Ídem de la Liturgia inglesa.

H) D. Sebastián de la Enzina, anglicano.—Traductor del Nuevo Testamento, o más bien refundidor del de Cipriano de Valera, ya mencionado.

I) Antonio Sandoval.

Fuentes: Las obras de los mismos heterodoxos.

CAPÍTULO XVIII

VINDICACIÓN DE ALGUNOS CÉLEBRES PERSONAJES ESPAÑOLES ACUSADOS DE DOCTRINA HETERODOXA POR VARIOS HISTORIADORES.

A) Doña Juana la Loca .—Bergenroth apunta por vez primera la idea del protestantismo de doña Juana.—Acógenla otros [p. 88] escritores extranjeros.—Falsedad y extravagancia de esta opinión.—Realidad de la locura de doña Juana.—Sus causas probables.—Fué muy anterior al nacimiento del luteranismo.—Carácter que toma la enajenación mental de la Reina en sus últimos años.— Recobra la razón y muere cristianamente.

B) Emperador Carlos V .—A pesar de sus vacilaciones políticas nunca asintió al luteranismo.—Reseña de su actitud respecto a aquella herejía en las diversas épocas de su vida.—Su conducta con los protestantes alemanes.—Juicio de sus actos de hostilidad contra el papado.—El saqueo de Roma.—Últimos años de Carlos V.—Su retiro en Yuste.—Ardor con que interpuso su poderosa innfluencia para el castigo de los protestantes vallisoletanos.

C) El príncipe D. Carlos .—Breve noticia de su desdichada vida.—Su educación y carácter.—¿Estuvo o no en relaciones con los flamencos?—Su propósito de huída.—Su prisión y muerte.—Sus sentimientos religiosos.—Testimonio de su confesor en este punto.—Otros datos contradictorios.—Aunque no tengamos a D. Carlos por católico fervoroso, faltan motivos para calificarle de protestante.

D) Juan Luis Vives .—Acendrada ortodoxia del príncipe de nuestros filósofos.—Observaciones sobre la célebre frase: Tempora habemus difficilia, etc.—Relaciones de Vives con Erasmo.—Los Comentarios a la Ciudad de Dios, de San Agustín.—La expurgación de este libro hecha por el Santo Oficio nada prueba contra las opiniones religiosas del sabio valenciano.—Vives y Enrique VIII de Inglaterra.

E) Fadrique Furió Seriol .—A pesar de sus opiniones sobre la conveniencia de hacer en lengua vulgar traducciones de la Escritura, de sus controversias con el siciliano Bononia, y de la prohibición que de algunos libros suyos hizo el Santo Oficio, no fué protestante.

F) El Arzobispo Fr. Bartolomé Carranza de Miranda .—Noticias biográficas.—Publicación de sus Comentarios al Cathecismo Christiano .—Promoción de Fr . Bartolomé a la silla primada de Toledo.—Elementos conjurados para su ruina: rivalidad del inquisidor Valdés: antigua enemistad de Melchor Cano.—Calificación que él y otros teólogos hicieron del Cathecismo .—Impetra Valdés de Roma unas letras en forma de Breve para procesar al [p. 89] Arzobispo.—Prisión de Fr. Bartolomé.—Su proceso en España.—San Pío V aboca a sí la causa.—Sentencia de Gregorio XIII que le declara sospechoso de herejía, mas no hereje, y le absuelve con abjuración de ciertas proposiciones.—Su muerte, y protestación de fe que la precedió.—Noticia de sus escritos.—No hay motivos para afirmar que cayese a sabiendas en opiniones heréticas.—Aprobación del Cathecismo por el Concilio de Trento.

Fuentes: Bergenroth: Letters, despatches and state papers relating the negotiations betwen England and Spain (1868). Su opinión ha sido victoriosamente refutada por los señores Cánovas del Castillo (en un discurso académico), La Fuente (Doña Juana la Loca vindicada de la nota de herejía) y Rodríguez Villa (Bosquejo histórico de la reina Doña Juana, formado con los principales documentos relativos a su persona).

Véanse todos los historiadores de Carlos V, y sobre su retiro en Yuste las obras de Stirling, Mignet, Pichot y Gachard, todos los cuales pusieron a contribución el famoso manuscrito de D. Tomás González.

Acerca del Príncipe D. Carlos merecen ser consultados los libros de Gachard y de Mouy, así como la Historia de los protestantes, de D. Adolfo de Castro, que sostiene la heterodoxia del hijo de Felipe II.

Para Luis Vives y Furió Seriol, véanse sus propias obras, y la biografía del primero escrita por Mayans.

Del proceso del Arzobispo Carranza sólo se conocía hasta ahora el libro de audiencias, conservado en la Academia de la Historia. El resto de la causa, aunque no íntegra, existía en esta provincia de Santander, y ha sido generosamente donada por su poseedor Sr. D. Manuel Crespo a la misma Academia. Hállanse, asimismo, noticias de la prisión y proceso del Arzobispo en la relación manuscrita de Ambrosio de Morales, en la vida, igualmente inédita, de D. Diego de Simancas, en las obras de Llorente y Adolfo de Castro, y en la biografía de Melchor Cano, por D. Fermín Caballero, a quien debemos la publicación de la censura de los Comentarios hecha por aquel famoso teólogo.

[p. 90] CAPÍTULO XIX

EL ANTITRINITARISMO Y EL MISTICISMO PANTEÍSTA EN EL SIGLO XVI

Miguel Servet

Noticias biográficas de Servet (Miguel de Reyes).—Patria.—Estudios de Filosofía y Derecho en Tolosa.—Relaciones de Servet con Ecolampadio, Bucero y Zuinglio.—Escándalo que producen en Alemania los primeros libros antitrinitarios de Servet.—Dedícase en París a la Medicina.—Descubre la circulación de la sangre. Publica un tratado acerca de los jarabes .—Controversias con los médicos franceses de su tiempo.—Primeras relaciones con Calvino.—Viajes de Servet.—Servet en Viena del Delfinado.—Imprime el Christianismi Restitutio .—Odiosos manejos de Calvino.—Hace que Arney delate el libro de Servet al Tribunal eclesiástico de Viena del Delfinado.—Proceso de Servet en Viena.—Su fuga a Ginebra.—Nuevo proceso que allí se le forma a instancias de Calvino.—Controversias.—Consulta a las iglesias suizas.—Entereza de Servet.—Su condenación.—Muere en las llamas.—Noticia de sus obras no teológicas.—Su edición de Tolomeo.—Análisis detenido de las obras teológico-filosóficas, en especial de la intitulada Christianismi Restitutio .—Idem del libro De Trinitatis erroribus, de los diálogos De Trinitate y de otros escritos semejantes.—Admirable vigor lógico de las obras de Servet.—Su Christología .—Enlace de esta doctrina con el sabelianismo y otras herejías de los primeros siglos de la Iglesia.—Exposición de la doctrina filosófica de Servet.—Su representación en nuestra historia científica.—Enlace de su sistema con el neoplatonismo renovado en el siglo XVI.—Paralelo entre Servet y Jordán Bruno.—Predecesores de Miguel Servet.—Servet y Maimónides.—Discípulos y sucesores de Servet.—Servet y Benito Espinosa.—Servet y el moderno panteísmo alemán.—El Cristo de Servet y el de Schleiermacher.—Reseña histórica de la secta antitrinitaria: los socinianos .—Extremada rareza de las obras de Servet.—Pormenores bibliográficos.

Fuentes: En España apenas se ha escrito sobre Servet, cuyo [p. 91] nombre para nada suena en la Bibliotheca de Nicolás Antonio. Sólo tenemos noticia de cuatro trabajos sobre el particular.

1.º El extenso y muy erudito artículo que le dedica Latassa en su Biblioteca de escritores aragoneses.

2.º Una biografía anónima publicada en 1855.

3.º Un largo capítulo del Sr. D. Patricio Azcárate en la Exposición de los principales sistemas filosóficos modernos.

4.º Los muy curiosos estudios biográfico-bibliográficos dados a luz en la Revista de Instrucción Pública (continuación de la Uníversitaria ), por el bibliotecario de la Universidad de Oviedo, Sr. Suárez Bárcena.

En cambio, en el extranjero han hablado largamente de nuestro famoso antitrinitario los historiadores de su secta, los biógrafos de Calvino, etc. Merecen especial aprecio los siguientes:

Bibliotheca anti-trinitariorum, de J. Christ. Sand.

Essai d'une histoire complete et impartiale des heretiques, por el profesor Morbeim (Helmsted, 1748).

Michel Servet, por Trechsel (1839). Forma el primer libro de su historia de los protestantes antitrinitarios.

Fragmento histórico acerca de Servet en las Lègendes et chroniques suisses, de De Valayre (París, 1842).

Relation du procès criminel intenté a Genève en 1553 contre Michel Servet, por Rilliet de Candolle (apologista de Calvino) en el tomo III de las Memorias y documentos de la Sociedad de Historia y Arqueología de Ginebra (1844).

Michel Servet, Estudio de E. Saisset en la Revue de Deux Mondes (1848).

Relaciones entre Calvino y Servet, por Tolin (1875).

Véase, además, la Memoria de Mignet sobre el establecimiento del protestantismo en Ginebra, y otros libros que fuera prolijo enumerar. De los antiguos citan buen número Latassa y Suárez Bárcena.

Para la apreciación de las doctrinas de Servet téngase en cuenta, sobre todo, sus obras reimpresas a fines del siglo pasado en Nuremberg y otras ciudades de Alemania, con la fecha de las ediciones antiguas.

[p. 92] CAPÍTULO XX

ARTES DIABÓLICAS.—HECHICERÍAS.—LOS BRUJOS

Consideraciones generales sobre la nigromancia y todo linaje de ciencias ocultas.—La magia entre los antiguos, y especialmente en Grecia y Roma.—Persistencia de tales supersticiones aun después de la propagación del cristianismo.—Historia de las artes goéticas en España.—Agüeros, hechicerías y prácticas supersticiosas en la época visigoda.—Ídem durante los primeros tiempos de la Reconquista.—Ídem en los siglos XIII y XIV.—Testimonios de autores coetáneos que nos demuestran su existencia.—Prohibiciones de las leyes y anatemas de los concilios.—Impugnaciones del fatalismo hechas por Fray Pedro Pascual, Raimundo Lulio y don Juan Manuel.—Notable desarrollo de las artes vedadas en el siglo XV.—D. Enrique de Villena.—Impugnaciones de Fr. Lope Barrientos y otros escritores.—Noticia y clasificación de las diversas especies de supersticiones usadas en aquella era.—Los herejes de Durango y Fr. Juan de Mella.—Los herejes de la sierra de Amboto: aparición de la brujería con todos sus caracteres.—La brujería y las Celestinas.—Recrudescencia de las artes diabólicas en el siglo XVI.—La magia erudita combínase con la cábala y la teosofía.—Influencia de las doctrinas de Cornelio Agripa y sus secuaces en España.—Nigromantes españoles: el doctor Torralba.—Escasa aceptación con que fueron recibidos tales deslumbramientos.—La magia vulgar o brujería .—Semejanza que presenta en todos los países de Europa.—Horrible depravación de costumbres a que servía de capa.—Testimonios españoles de su existencia en nuestra península, aunque en más reducida escala que en otros países.—Notable pasaje del autor de El Crotalón .—Empeñadas cuestiones que promueve entre teólogos y juristas la magia.—Publicación de las Disquisitiones Magicae, del P. Martín del Río.—Análisis de este peregrino libro.—Triunfo de las opiniones de su autor, y triste resultado de sus trabajos.— Jurisprudencia establecida en este punto.—Impugnadores españoles de la magia.—Templanza y sensatez con que algunos se explicaron.— [p. 93] Pedro Ciruelo y su Reprobación de hechicerías y supersticiones .—La Inquisición y los brujos.—El Auto de fe de Logrofio en 1610.—Toma cuerpo la opinión escéptica, ilustrada y tolerante respecto a las artes diabólicas.—El Discurso de Pedro de Valencia acerca de las brujas y cosas tocantes a magia .—El Coloquio de los Perros, de Cervantes.—Continuas alusiones a brujos y hechiceras en la novela y en el teatro.—Vanse extinguiendo gradualmente o tomando un carácter más inocente estas supersticiones.—Notable modificación que experimentan en el transcurso del siglo XVII.—Principales sitios designados como aquelarres.—Los hechizos de Carlos II y otros casos semejantes.—Impugnaciones del P. Feijóo, a principios del siglo XVIII.—Persistencia de la opinión vulgar hasta nuestros días.—Renacimiento contemporáneo de las artes goéticas con el nombre de espiritismo .

Fuentes: Los libros de Martín del Río, Ciruelo, Pedro de Valencia, etc., etc., ya mencionados, y otros muchos de menor importancia que de propósito o por incidencia hablan de esta materia. Sobre los herejes de la sierra de Amboto, el Dante de Villegas (anotaciones a las estancias 19 del canto IX y 20 del XX). Véase asimismo sobre los de Durango la Crónica de D. Juan II. Para los tiempos anteriores pueden consultarse, además de los libros de San Pedro Pascual, Barrientos, etc., citados, las muy curiosas indicaciones esparcidas en diferentes capítulos de la Historia crítica de la literatura española de D. José Amador de los Ríos, y los artículos que sobre la misma materia dió a luz en la Revista de España. Fuente notable es, asimismo, por lo que toca al siglo XVII, el célebre Auto de Logroño, tan conocido por haberle exornado con notas burlescas y sazonadísimas, si bien de sabor asaz volteriano, Moratín. De las obras extranjeras, nada decimos, por referirse casi todas a la historia de la magia en general y no en particular a la de España.

CAPÍTULO XXI

EL QUIETISMO EN EL SIGLO XVII.— Miguel de Molinos

Razones para colcar el quietismo al fin de las herejías desarrolladas en nuestro suelo durante los siglos XVI y XVII.—Precedentes [p. 94] históricos del Molinosismo .—El Misticismo panteísta .—La secta de los alumbrados de Extremadura y Sevilla.—Su enlace con la de los iluminados de Italia.—Nacimiento y progresos de esta impúdica herejía.—Es exterminada por la Inquisición.—Noticias sobre este punto.—Enlace del quietismo con los sistemas gnósticos .—Noticias biográficas de Miguel de Molinos.—Publica en Roma la Guía espiritual que desembaraza el alma y la conduce al interior camino para alcanzar la perfecta contemplación.—Exposición de la doctrina heterodoxa contenida en este libro.—Condenación de diez y ocho proposiciones.—Proceso y prisión de Molinos.—Su muerte.—Noticia breve de sus más famosos discípulos y secuaces (Francisco Le Combe, Juana Guyon, etc.).—Propágase el quietismo en Francia.—Controversias que suscita.—Fenelón y el quietismo .—El quietismo en España.—Impugnaciones de Fray Antonio de Jesús María y otros.—Procesos de varias monjas y beatas acusadas de quietismo .—El quietismo en el siglo XVIII.— Reflexiones sobre esta herejía y sobre sus tristes consecuencias morales.

CAPÍTULO XXII

EL JANSENISMO REGALISTA DEL SIGLO XVIII Y COMIENZOS DEL PRESENTE

Reflexiones sobre el carácter general del siglo XVIII.—Modificaciones producidas en nuestras costumbres e ideas por el influjo francés.—Qué era el jansenismo .—¿Contó secuaces en España la doctrina de Jansenio sobre la gracia ?—Los jansenistas españoles más que nada fueron galicanos .—Apoyo que vinieron a prestar por ende al regalismo de nuestros jurisconsultos.—Motivos para no incluir determinadamente en esta historia a los que en España se llamaron jansenistas, ni a los partidarios del regalismo, y limitarse a consideraciones generales.

El regalismo en las esferas oficiales.—Precedentes: el Memorial de Chumacero, etc.—Macanaz.—Sus proyectos y caída.—Los consejeros de Carlos III.—Aranda, Moñino, Roda, Campomanes, etcétera.— Volterianismo disfrazado de muchos de ellos.— Tratado [p. 95] de la regalía de amortización .—Expediente del Obispo de Cuenca. Extrañamiento de los jesuítas.— Juicio imparcial del Monitorio de Parma.

El jansenismo español .—Manía de hablar de las falsas decretales y de la fuerza de la antigua disciplina.—Libros manifiestamente galicanos .—Fundación de la Colegiata de San Isidro en reemplazo de los jesuítas.—La Inquisición en manos de los jansenistas.—Prelados a quienes se tildó de jansenismo : Climent, Tavira, etc.—Pastorales de algunos de ellos.—Introducción de la Teología Lugdunense en nuestras aulas.—Obras de Amat, Martínez Marina, Villanueva y otros, puestas en el Indice de Roma.—El jesuíta Masdeu se acuesta al partido de los llamados jansenistas en su Historia crítica de España .—Trabajos de historia eclesiástica en sentido galicano.—El jansenismo en las Cortes de Cádiz.—Otros jansenistas de menor cuantía.—Bedoya y su opúsculo latino sobre la potestad de los Obispos, etc.

Prolongación del jansenismo regalista hasta nuestros días, sostenido por intereses políticos.—Cisma de Alonso durante la regencia de Espartero.—El llamado jansenismo en España sirvió muchas veces de disfraz para proyectos anticatólicos de otro linaje.

CAPÍTULO XXIII

EL VOLTERANISMO EN ESPAÑA EN EL SIGLO XVIII

Olavide.—Cabarrús.—Urquijo

La filosofía enciclopedista.—Reseña de su historia, principios y tendencias.—Sus impugnadores españoles.—Penetra en las esferas oficiales apoyada por los jansenistas y regalistas .—Maridaje de estos tres elementos para la expulsión de los jesuítas.

A) Primeros alardes ostensibles de impiedad.— Don Pablo Olavide .—Extraños sucesos de su vida.—Su nacimiento y estudios en Lima.—Oidor del virreinato.—Su conducta después del terremoto de 1746.—Olavide en España.—Cargos que desempeñó.—Sus viajes a Francia.—Su amistad con Aranda.—Olavide, asistente de Sevilla.—Superintendente de las colonias de Sierra Morena.—Escepticismo religioso de Olavide.—Sus imprudentes palabras [p. 96] entre los colonos.—Es delatado por Fr. Bernardo de Friburgo.—Prisión y proceso inquisitorial de Olavide.— Autillo de fe de 26 de noviembre de 1778.—Sentencia leída en él.—Olavide en el Monasterio de Sahagún.—Fuga de Olavide a Francia, donde se titula Conde del Pilo .—Publica un opúsculo contra las órdenes religiosas.—Impresión que en él hicieron los horrores de la revolución francesa.—Saludable transformación obrada en su ánimo. Escribe El Evangelio en triunfo .—Publícase este libro en Valencia.—Su éxito inmenso.—Vuelta de Olavide a España.—Vida penitente y retirada de sus últimos años.—Otras obras de Olavide: los Poemas cristianos, la traducción de los Psalmos.—Versiones de obras dramáticas francesas ( Zaira, Mérope, etc.), hechas en el primer período de su vida.—Escritos inéditos de Olavide.—Escaso valor literario de sus trabajos.—Mérito relativo de El Evangelio en triunfo.

B) Nuevas manifestaciones del volterianismo .— El Conde de Cabarrús, aventurero francés.—Salva la crisis monetaria con la creación del Banco de San Carlos.—Importancia política que desde entonces adquiere.—Sus posteriores vicisitudes.—Ideas heterodoxas esparcidas en sus Cinco cartas sobre los obstáculos que la naturaleza, la opinión y las leyes oponen a la felicidad pública .—Combate la indisolubilidad del matrimonio y el celibato del clero.

C) D. Mariano Luis de Urquijo, ministro de Carlos IV.—Carácter frívolo e insustancial de este personaje.—Sus proyectos cismáticos.—Su famoso decreto de 5 de setiembre de 1800.— Contestaciones de varios obispos favorables al cisma.—Caída y proceso de Urquijo.—Volterianismo de sus ideas.—Sus aficiones literarias.—Su traducción de La muerte de César y discurso que la precede.—Proceso que le formó la Inquisición.

CAPÍTULO XXIV

EL VOLTERIANISMO.—SU INFLUENCIA EN LAS LETRAS.—

LA TERTULIA DE QUINTANA

Carácter de la literatura en el siglo pasado.—Literatos francamente volterianos, aunque no hiciesen profesión de impiedad en sus escritos.—D. Félix María Samaniego.—Proceso que le formó [p. 97] la Inquisición y penitencias que le impuso.—Su sátira contra los frailes.—Licencia e impiedad de ciertas obras suyas inéditas.

Periódicos con tendencias enciclopedistas: El Censor .—Noticia de sus redactores, Cañuelo, Pereira, etc.— El Apologista Universal .—Los Padres Centeno y Fernández.—Proceso formado al primero.—Prohibición de estos papeles por el gobierno de Carlos III.

Enciclopedismo de varios economistas .—El doctor Normante y Carcaviella, profesor en Zaragoza.—Causa que le formó la Inquisición, a instancia de Fray Diego de Cádiz y otros capuchinos.—La Sociedad Cantábrica manda traducir las obras de Destutt Tracy.—Progresos de la filosofía sensualista .—Noticia de los principales tratadistas y expositores del condillaquismo.

La escuela salmantina, infiltrada de enciclopedismo .—Fr. Bernardo de Zamora.—Causa formada a D. Ramón de Salas, profesor de Jurisprudencia.—El filosofismo poético .—Vestigios de esta tendencia en algunas composiciones de Meléndez y otros.—Cunden en Salamanca los libros de Locke, Montesquieu y Rousseau.—Cándido optimismo de Cienfuegos y otros filosofistas poéticos.

La tertulia de Quintana.—Noticias de algunos de sus más habituales concurrentes.—Retírase de ella Capmany.—Hácese la tertulia foco de novedades políticas y religiosas.—Odas de Quintana.—Relaciones de Blanco White y Marchena con la tertulia quintanesca .—Fundación de las Variedades de ciencias, literatura y artes .—Posteriores vicisitudes de Quintana y sus tertulios.—Controversia entre él y Capmany en Cádiz.—Causa formada en 1814 a Quintana por la Inquisición de Logroño.— Defensa de sus poesías.

Noticias de Somoza, Jérica y otros literatos volterianos de las primeras décadas de este siglo.—Muerte impía de Somoza.—Cristiana muerte de Quintana.

Influencia del volterianismo en el grupo antisalmantino (Melon, Moratín, Estala, Hermosilla, etc.).

[p. 98] CAPÍTULO XXV

EL VOLTERIANISMO EN ESPAÑA A FINES DEL SIGLO XVIII Y COMIENZOS DEL XIX.— El abate Marchena

A) Patria.—Primeros estudios.— Carta contra el celibato eclesiástico .—Traducción de Lucrecio .—Proceso formado en Sevilla al Padre Manuel Gil, de los clérigos menores.—Emigra Marchena a Francia.—Dase a conocer como escritor político y controversista.—Colabora con Marat en L'Ami du peuple .—Únese a los girondinos.—Noticias acerca de su prisión en las cárceles del terror.—Vuelve a escribir, durante el gobierno de Tallien, en L'Ami des Lois .—Alistóse en el Ejército del Rhin.—Forja un fragmento de Petronio y más adelante otro de Catulo.—Es recibido friamente por Mad. Stael en su quinta de Coppet.—Viene a España con Murat.—Es conducido a las cárceles de la Inquisición.—Acompaña al rey José en su viaje a Andalucía en 1810.—Hospédase en casa de Arjona.—Publica bajo los auspicios del monarca intruso, varias traducciones del francés.—Acompáñale en su retirada a Valencia en 1813.—Pasa de allí a Francia.—Publica en Burdeos las Lecciones de filosofía moral y elocuencia .—Vuelve a España en 1820, y muere en 1821.—Originalidades de su carácter.—Noticia extensa y detallada de sus obras, así originales como traducidas .—Discurso sobre la extinción de regulares .—Discurso preliminar a las Lecciones de Filosofía moral .—Preámbulo a las Lecciones mismas.—Varios folletos impíos.—Análisis del Ensayo de Teología y de su refutación por el doctor Heckel.—Diferentes opúsculos políticos en lengua francesa.—Obras literarias: traducciones del Tartufe, del Avaro y de la Escuela de las Mujeres, de Filiuto o el Egoísta, de Los dos yernos y de otras piezas francesas.—Ídem de algunos poemas de Ossiam y de la Heroída de Pope.—Poesías varias, especialmente la oda a Cristo crucificado, la epístola sobre la libertad política y la tragedia Polixena .—Marchena juzgado como poeta y como crítico.—Marchena considerado como propagandista incansable de doctrinas impías.—Traduce los Cuentos y novelas de Voltaire, la Pucelle del mismo, la [p. 99] Julia y el Emilio de Rousseau, varias obras de Volney, Dupuis, Benoit y las Cartas persas de Montesquieu.

B) Noticia de otros traductores de obras enciclopedistas y volterianas.—Causa sobre la impresión de las Ruinas de Volney.—¿Es de Moratín una traducción del Cándido impresa con su nombre en Valencia, etc., etc.?

CAPÍTULO XXVI

EL VOLTERIANISMO EN ESPAÑA A PRINCIPIOS DEL SIGLO XIX

Gallardo

A) D. Bartolomé José Gallardo.—Patria.—Primeros escritos: Defensa de las poesías de Iglesias, El soplón del Diarista de Salamanca .—Traduce en 1803 la Higiene de Presarín y un discurso de Mihert sobre la relación de la medicina con las ciencias morales, escrito en sentido materialista.—Publica Consejos sobre el arte de la predicación .—Grandes conocimientos bibliográficos de Gallardo.—Reimprime en 1806 el Robo de Proserpina, de Faria.—Inmensos trabajos de erudición que inicia antes de 1808.—Bibliotecario de las Cortes en 1812.—Publica la Apología de los palos , y poco después el Diccionario crítico burlesco .—Volterianismo de este librejo.—Tempestades que promueve.—Prisión de Gallardo.—Apología de su libro.—Es defendido en las Cortes por el diputado americano Mejía, y absuelto.—Reacción de 1814: Gallardo en Inglaterra.—Proyecta dar a la estampa varios libros.—Época constitucional del 20 al 23.— Carta-blanca, Zurribanda al Zurriago y otros opúsculos políticos, de Gallardo.—Pérdida de sus libros y manuscritos en el famoso día de San Antonio de 1823.—Publica Gallardo en 1832, 33 y 34 diversas invectivas contra Reinoso y Lista ( Cuatro palmetazos bien sentados por el dómine Lucas a los gaceteros de Bayona, etc.), Hermosilla, Miñano, Burgos ( Las letras de cambio o los mercachifles literarios ).—Prisión y proceso que le acarrea el último de estos opúsculos.—Da a luz los cinco números de su Criticón .—Prosigue en sus investigaciones bibliográficas.—Extravagancias y originalidades de su [p. 100] carácter.—Aparece en 1848 el Buscapié de don Adolfo de Castro.—Arrójase a impugnarlo Gallardo en el Buscapié del buscarruido, en el Zapatazo a Zapatilla y en otros folletos.—Reñida pelamesa literaria entre Gallardo, Estébanez Calderón y D. Adolfo de Castro.—Muerte de Gallardo en 1859.—Obras de Gallardo.—Sus maravillosos apuntamientos bibliográficos hoy reunidos en el Ensayo de una Biblioteca Española de libros raros y curiosos .—Sus poesías.—Sus críticas literarias.—Su absoluta incredulidad religiosa.

CAPÍTULO XXVII

EL VOLTERIANISMO EN ESPAÑA A PRINCIPIOS DEL SIGLO XIX.—

DOS HISTORIADORES DE LA INQUISICIÓN

A) D. Juan Antonio Llorente .—Noticias biográficas.—Nace en Rincón de Soto, diócesis de Calahorra.—Sus estudios de teología y cánones.—Recibe las sagradas órdenes.—Comienzan a inocularse en él las opiniones heterodoxas a consecuencia del trato con persona desconocida.—Afición de Llorente a las investigaciones históricas y arqueológicas.—Su Memoria sobre una antigüedad romana de la diócesis de Calahorra .—Llorente en Madrid.— Protégele el Príncipe de la Paz, y subvencionado por él escribe las Noticias históricas de las tres provincias vascongadas, obra encaminada a preparar la abolición de los fueros.—Llorente, secretario de la Inquisición.—Sus proyectos de reforma de aquel tribunal.—La Inquisición en manos de los jansenistas.—Caen del poder los amigos de Llorente.—Complicaciones a que éste se vió expuesto.—Extrémase su heterodoxia, y de jansenista pasa a cuasi-volteriano .—Llorente, canónigo maestrescuela de Toledo.—Llorente, afrancesado; distinciones que obtiene de parte del rey José.—Agrúpase la falange volteriana en torno del monarca intruso.—Escritos cismáticos de Llorente en este período.—La Memoria sobre división de Obispados, la Colección de papeles relativos a dispensas matrimoniales y otros puntos de disciplina eclesiástica.—Memoria sobre el Tribunal de la Inquisición, presentada a la Academia de la Historia.—Llorente lleva a cabo la [p. 101] abolición del Santo Oficio, y examina detenidamente sus papeles.—Emigra en 1813.—Reside en varias ciudades de Francia y fíjase al cabo en París, donde publica la Defensa canónica y política contra injustas acusaciones de fingidos crímenes.— Dirige una humillante exposición a Fernando VII.—Publica casi simultáneamente la Histoire critique de l'Inquisition d'Espagne .—Noticia de otras publicaciones suyas sobre tal materia.—Da a la estampa su autobiografía.—Otros escritos de Llorente.—Brillante polémica con el conde de Neufchateau sobre el Gil Blas.—Edición de las obras de Fr. Bartolomé de las Casas.—Llorente rompe en sus últimos años todo freno, traduce la inmoral novela Le chevalier de Faublas , y publica sucesivamente tres escritos heterodoxos: le tableau moral et politique des Papes, el Proyecto de Constitución Religiosa y la Apología del mismo proyecto .—El gobierno francés le obliga a salir de su territorio.—Muere Llorente en Madrid en 1823.—Repetidas impresiones de sus escritos.—Sus impugnadores.—Catálogo de sus obras.

B) D. Antonio Puigblanch .—Natural de Mataró.—Novicio en la Cartuja de Montealegre.—Catedrático de Hebreo en Alcalá.—Publica allí una Gramática .—Da a luz en Cádiz, 1811, La Inquisición sin máscara .—Otros escritos suyos: la oda Al fanatismo .—Puigblanch, diputado a Cortes durante la época constitucional del 20 a 23.—Emigra a Londres.—Los Opúsculos gramático satíricos y otras obras.—Agrias polémicas de Puigblanch con Villanueva, Salvá y otros.—Extravagancias del doctor catalán.—Sus grandes conocimientos filológicos.—Noticia de sus demás obras.—Sus opiniones religiosas.—Su muerte.

CAPÍTULO XXVIII

UN TEOFILÁNTROPO ESPAÑOL

A) Andrés María Santa Cruz .—Noticias biográficas.—Es maestro de los hijos de un príncipe alemán.—Va a Francia y toma parte en la revolución.—Amigo de Marchena.—Forma parte de la Sociedad de los Teofilántropos (adoradores del hombre como Dios).—Vuelve a España y muere en la obscuridad y [p. 102] en la miseria.—Análisis del libro intitulado Le culte de l'humanité .—Enlace de las doctrinas de Santa Cruz con las de Servet, Arnaldo de Vilanova y Prisciliano.

B) Más sobre ciertos escritores volterianos o de doctrina sospechosa en las primeras décadas de este siglo.—Las sociedades secretas.—Suplicio del deísta Cayetano Ripoll en Valencia.

CAPÍTULO XXIX

PROTESTANTES NOTABLES EN LOS PRIMEROS AÑOS DE ESTE SIGLO.— Blanco

D. José María Blanco (White).—Noticias biográficas.—Ascendencia de Blanco.—Estudios de Blanco.—Forma parte de la Academia de Letras Humanas de Sevilla con Arjona, Reinoso, Roldán, Lista y otros.—Rector del Colegio de Maese Rodrigo.—Magistral de la capilla de San Fernando en Sevilla.—Su viaje a Madrid.—Director del Colegio Pestalozziano.—Concurre a la tertulia de Quintana.—Incredulidad de Blanco.—En 1809 colabora en el Semanario Patriótico .—Embárcase para Inglaterra en 1810.—Se hace protestante.—Publica sucesivamente tres periódicos en castellano, El Español, El Español Constitucional y las Variedades o el Mensajero de Londres .—Es canónigo de la Catedral protestante de San Pablo.—Escribe en sentido tory folletos contra la emancipación de los católicos.—Sus cambios religiosos.—Hácese antitrinitario.—Su odio ciego contra España.—Notable mudanza que experimenta en sus últimos años.—Muere en Liverpool en 1841.—Carácter de Blanco, débil y tornadizo.—Sus altas prendas intelectuales.—Noticia y análisis de sus obras.—Poesías escritas antes de su salida de España.—Artículos periodísticos.—Poesías castellanas compuestas en Inglaterra.—Poesías inglesas.—Escritos de polémica teológica en lengua inglesa.—Ídem de controversia política.—Tratado del comercio de negros .— Cartas sobre España, bajo el pseudónimo de D. Leocadio Doblado.—Mérito e importancia grande de este libro.— Luisa de Bustamante, novela castellana.—Consideraciones que sugiere esta obra, última que salió de la pluma de Blanco.—Mérito de Blanco como prosista eminente.—Inferior a sí mismo como poeta.

[p. 103] CAPÍTULO XXX

PROTESTANTES NOTABLES EN LOS PRIMEROS AÑOS DE ESTE SIGLO.—

Don Juan Calderón

A) Noticias biográficas.—Calderón, fraile franciscano.—Liberal.—Emigra en 1823.—Se hace protestante a su manera, esto es, semi-incrédulo .—Va a Londres en 1829.—Vuelve a Francia en 1830.—Torna a España durante la regencia de Espartero.—Emigra nuevamente en 1843.—Muere en Londres.—Obras de Calderón.—Análisis de las más notables.—Sus doctrinas religiosas expuestas en el Catolicismo neto y en El examen libre .—Sus notables estudios filológicos.— La Revista Gramatical .— La Análisis lógica y gramatical de la lengua española .— Cervantes vindicado .

B) Breve noticia de otros protestantes.—Lucena, Sotomayor, Montsalvatje, etc.—Ligera idea de sus escritos.—Tentativa protestante de Matamoros en Granada.

CAPÍTULO XXXI

UN CUÁKERO ESPAÑOL

D. Luis Usoz y Río .—Noticias biográficas.—Viajes y estudios.—Erudición de Usoz.—Cae en sus manos la Apología de Barclay, traducida por Alvarado.—Va a Inglaterra en 1839 y se afilia en la secta de los cuákeros .—Su fraternal amistad con Benjamín Wiffen.—Emprenden unidos la publicación de los Reformistas Españoles .—Constancia con que llevan a cabo su empresa.—Publicación del Carrascón en 1847 y de la Epístola consolatoria en 1848.—Continúan sin interrupción sus tareas, hasta dar a luz veinte tomos de Reformistas , el último en 1865.—Muerte de Usoz.—Esmero y prolijidad de sus ediciones.—Ilustraciones que las acompañan.—Otras publicaciones suyas.—El Cancionero de obras de burlas, de 1529.—El Diálogo de la lengua .—Mérito de Usoz como bibliógrafo y reproductor de libros antiguos.—Su importancia como hebraizante.—La traducción de Isaías .—Otros trabajos de menor importancia,

[p. 104] CAPÍTULO XXXII

EL KRAUSISMO EN ESPAÑA.—D. Julián Sanz del Río

A) Precedentes del Krausismo en España.— La Unidad Simbólica, de Álvarez-Guerra.—Análisis de este extravangantísimo libro.—La traducción del Derecho Natural, de Ahrens, por Navarro Zamorano.—La impugnación de Balmes en su compendio de Historia de la Filosofía.

B) Noticias biográficas de Sanz del Río.—Patria.—Estudios de Teología y Derecho en Granada y Alcalá.—Dásele comisión de ir a Alemania con objeto de estudiar los modernos sistemas filosóficos.—Se dedica a aprender la lengua, y aplícase luego en Heidelberg a la doctrina de Krause.—Su correspondencia con D. José de la Revilla.—Vuelve a España Sanz del Río.—Retírase a Illescas, y prosigue allí sus estudios y meditaciones filosóficas.—Primera edición de la Analítica en 1847.—Entrada de Sanz del Río en el profesorado oficial.—Sus primeros discípulos.—Método pedagógico de Sanz del Río.—Estado de la filosofía en España al aparecer el Krausismo en nuestras aulas.— Discurso inaugural de Sanz del Río.—Segunda edición de la Analítica .—Traducción del Doctrinal de Historia, de Weber; publícase bajo la protección de diversos personajes conservadores .— Ideal de la humanidad para la vida .— Programas de Psicología, Lógica y Ética .—Impugnaciones del Krausismo en el Ateneo.—Impugnaciones de Ortí y Lara.—Cartas vindicatorias de Sanz del Río.—Continúa su propaganda: enseñanza privada y pública.—Segunda generación krausista.— Círculo filosófico y literario de Madrid: discusiones.—Sigue Ortí y Lara su campaña anti-krausista .—Los textos vivos de Navarro Villoslada en El Pensamiento Español .—La prensa democrática informada de krausismo.—El Ideal de la Humanidad en el Índice de Roma.—Expediente formado a Sanz del Río.—Su separación y la de otros profesores.—Revolución de Setiembre.—Influjo de Sanz del Río y su escuela en ella.—El Krausismo triunfante.—La legislación revolucionario-krausista.—El Krausismo en la prensa y en la enseñanza.—Tercera generación krausista.—Muerte, entierro y testamento de Sanz del Río.— [p. 105] Sus obras póstumas.—Idea general de los resultados de su propaganda, relativamente a la religión, moral, política, filosofía, ciencias particulares, etc.

CAPÍTULO XXXIII

Don Fernando de Castro

A) D. Fernando de Castro, natural de Sahagún, entre en los gilitos de Valladolid.—Su misticismo.—Sus dudas y combates interiores.—Su exclaustración.—Va a Madrid.—Dase a conocer como orador sagrado.—Catedrático de Instituto primero, y más tarde en la Escuela Normal, de Filosofía .—Sus Nociones de historia: boga que alcanzan.—Sigue Castro las vicisitudes de la Facultad de Filosofía.—Nómbrasele capellán de honor.— Apología de dogma de la Concepción .— El Quijote de los niños .—Castro en candidatura para Obispo: sin resultado.—Segundo período de su vida: heterodoxia latente .—Le perseguía la duda: angustias.—Causas de su caída: su orgullo: su escaso saber teológico: su trato con Sanz del Río y demás espíritus fuertes de la Central: sus malas lecturas; él niega que la ambición desairada y la licenciosidad influyesen en su conducta.—Su famoso sermón en las exequias de Fernando VII.—Su discurso de recepción en la Academia de la Historia Sobre los caracteres históricos de la Iglesia española .—Refutación del mismo por Villoslada en El Pensamiento Español .—Expulsión de Castro de la Universidad.—Tercer período: heterodoxia manifiesta .—Vuelve al profesorado con la revolución de septiembre.—Su rectorado.—La circular a las Universidades e Institutos de España y del extranjero proponiéndoles hacer vida de relación y armonía .— El Boletín-Revista de la Universidad de Madrid, órgano del Krausismo.—Planes, programas, preliminares e introducciones.— Conferencias para la educación de la mujer: discursos pronunciados en ellas.— Escuela de Institutrices .—Biografía satírica de Castro en El Museo Universal .—Sale del Rectorado.—Es presidente de la Sociedad Abolicionista.—Senador por León en el reinado de Don Amadeo.—Carla a D. N. Salmerón felicitándole por su discurso sobre la Internacional.—Actividad [p. 106] extraordinaria que despliega en todo.—Prosigue el Compendio de Historia Universal, comenzado antes de la revolución.—Espíritu francamente heterodoxo de sus últimos tomos.—Proyecto frustrado de un culto sincrético, de que él mismo da idea en su Memoria Testamentaria .—Su muerte y testamento.—Descripción de su entierro.— Examen crítico de su Memoria Testamentaria, por D. Miguel Sánchez en el Consultor de los Párrocos.

B) D. Tomás Tapia .—Eclesiástico.—Su vida ante-krausista .—Su iniciación con Sanz del Río.—Su análisis crítico de la Filosofía Fundamental de Balmes en el Boletín-Revista .—Refútale Ortí y Lara en La Ciudad de Dios .—Discurso de Tapia sobre la religión y las religiones en las conferencias para la educación de la mujer .—Obtiene la cátedra de Sistema de la Filosofía, fundada en su testamento por Sanz del Río.—Muerte de Tapia.

C) D. Juan Alonso Eguílaz .—Redactor del Universal .—Su catecismo de la Religión Natural .—Su Teoría de la inmortalidad del alma .—Otros escritos heterodoxos.

D) Noticia de algunos protestantes españoles, ya difuntos, que han derramado sus doctrinas en estos últimos años.

NOTAS A ESTE PLAN

1.ª En los doce últimos capítulos no he señalado fuentes, por ser más conocidas e ir en parte indicadas en el plan mismo y en la carta acerca de las monografías expositivo-críticas .

2.ª No van incluídos en este plan, por olvido mío al redactarlo, el español Mauricio, fautor del panteísmo de Amaury de Chartres y David de Dinant, y por tal condenado en 1215, y el jesuíta chileno del siglo pasado P. Lacunza que vertió sentencias milenaristas en su obra, por otra parte muy apreciable, La Venida del Mesías en gloria y majestad, publicada con el pseudónimo de Ben-Ezra, y refutada por el sevillano Roldán en El Ángel del Apocalipsis . Otro libro también milenarista y semejante la del P. Lacunza apareció en Logroño hacia 1835, con el título de Daniel .

3.ª Escrito tiempo atrás este plan , ofrece hoy algunas incongruencias, como la de suponer vivo al sabio D. Fermín Caballero, [p. 107] que lo estaba en efecto, para gloria de nuestras letras y consuelo de sus amigos, cuando esto se redactaba. Es de esperar que los herederos y testamentarios del eminente erudito den a luz sus obras inéditas, reparando así en alguna manera la pérdida incomparable que con su muerte experimentó la ciencia española.

4.ª Como en este artículo y en alguna de las cartas anteriores he tratado puntos enlazados con el dogma, y quizá por mi escaso saber teológico se haya deslizado alguno expresión inexacta, concluyo, según la loable usanza de nuestros antiguos escritores, sometiendo todas y cada una de mis frases a la corrección de nuestra Santa Madre la Iglesia Católica, en cuyo seno vivo y quiero morir.

       M. MENÉNDEZ PELAYO.
       Santander, 9 de setiembre de 1876.

Notas

[p. 76]. [1] . París, 1617. En el mismo volumen se hallan los opúsculos de Paulino de Aquileya.

[p. 76]. [2] . Tendremos ocasión de hablar de la herejía de Elipando en la monografía dedicada a S. Beato, gloria de esta provincia, en nuestros Estudios sobre escritores montañeses .