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Obras completas de Menéndez... > BIBLIOGRAFÍA HISPANO-LATINA... > IV - VI : HORACIO > V : HORACIO II > POESÍAS DE FRAY LUIS DE LEÓN, ACOTADAS POR D. MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO I. — TRADUCCIONES HORACIANAS: LIBRO IV

Datos del fragmento

Texto


       LIBRO IV

        ODA I

        INTERMISA, VENUS, DIU

       Después de tantos días,
       O Venus, ¿otra vez soplas el fuego
       De tus duras porfías?
       ...........................

[Véase el texto integro en la pág. 123 de este volumen.]

NOTAS

Hermosa traducción y en algunas estrofas inmejorable.

9-10. Admirablemente dicho, mejor que en el original:

       Jam durum imperiis.

11-12. Todavía más enérgico en la traducción que en el original.

13-18. Falta el domum Pauli y el purureis ales oloribus .

31-36. Linda estrofa.

41. Falta el pede candido y el morem Salium , dos circunstancias importantes.

44-46. Traducción algo oscura y débil del spes animi credula mutui .

49-60. Estas dos bellísimas estrofas tienen toda la suave languidez de los ocho últimos versos de Horacio.

           [p. 302] ODA XIII

                AUDIVERE, LYCE

              Cumplióse mi deseo,
              Cumplióse, o Lyce; a la vejez odiosa
              Entregada te veo,
             Y todavía parecer hermosa
       5    Quanto puedes procuras,
             Y burlas, y haces mil desenvolturas.

             Y con la voz temblando
              Cantas por despertar el perezoso
              Amor, que reposando
       10  Se está despacio sobre el rostro hermoso
              De Chía la cantora,
              Que de su edad está en la flor agora.

              Que sobre seca rama
              No quiere hacer asiento, ni manida
       15  Aquel malo, y desama
              Te ya; porque la boca denegrida,
             Y las canas te afean,
              Que en la nevada cumbre ya blanquean.

             Y no son poderosas
       20  Ni las granas de Coo, ni los brocados,
              Ni las piedras preciosas
             A tornarte los años, que encerrados
              Debajo de su llave
              Dejó la edad, que vuela más que el ave.

       25 ¿Qué se hizo aquel donayre,
              Aquella tez hermosa? ¿dó se ha ido
              Del movimiento el ayre?
              ¿Aquella, aquella dó ha desparecido,
              Aquella en quien bullía
       30  Amor, que enagenado me tenía?

              No hubo más amada
              Beldad, después de Cynara, más clara,
              De más gracias dotada;
              Mas ¡ay! ¿cómo robó la muerte avara
       35  A Cynara temprano,
             Y con la Lyce usó de larga mano?
             [p. 303] Dióle que en larga vida
            Con la antigua corneja compitiese,
            De años consumida,
            40 Para que con gran risa ver pudiese
            La gente moza herviente
            Vuelta en pavesa ya, la hacha ardiente.

NOTAS

Buena traducción.

6. Falta el bibis , que es necesario para la inteligencia del cantu tremulo de la estrofa siguiente.

13-15. Muy bien.

18. Cfr. «Imitación de diversos.»

28. Illius, illius.

Jovellanos, en la Epístola a sus amigos de Sevilla, imitó algo de esta oda.

Notas