Volumen 17 - carta nº 539

De JACINTO O. PICÓN
A MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO

Madrid, 12 julio 1904

Mi siempre querido amigo: Aunque sé que ayer le escribieron a V. dándole cuenta del estado de Rodriguez Marin, quiero hacerlo yo tambien. Llegó anteayer con su señora: en la estacion le esperábamos sus paisanos el senador Luis Palomo y el pintor Gonzalo Bilbao, y yo. Por la tarde se trasladó al sanatorio de Sta. Teresa en el paseo del Cisne y ayer mañana fué operado, por el Dr. Cisneros, durando la operación dos horas. Como dice el vulgo, salió bien. He vuelto esta mañana al sanatorio. Segun me ha dicho Gonzalo Bilbao se trataba de un tumor canceroso, el tumor perlado, córneo, propio de los fumadores. Cisneros ha operado en hombres 300 casos: todos fumaban: en mugeres tres, y de estas fumaban dos. Ha dicho tambien Cisneros que es, dentro de los de su clase, el tumor que menos se reproduce ó uno de los que menos se reproducen, y que á Rodriguez Marin le ha raspado &.ª &.ª energicamente. Ahora, el tiempo dirá. El enfermo esta animado. Yo puedo añadir que ademas del tabaco ha contribuido á la enfermedad el abuso de la bebida tan frecuente en aquella bendita Sevilla donde no hay hora sin caña ni minuto sin trago. En fin, esperemos que se salve hombre que vale tanto y que por tantos títulos merece ser querido.—Otro dia hablaremos de otras cosas.

Mi hija está para parir de un dia á otro, y yo muy intranquilo.

Reciba V. un fuerte abrazo de su mejor amigo

Jacinto

Picón a Menéndez Pelayo, p. 290-291.