Buscar: en esta colección | en esta obra
Epistolario > Volumen 12 (Julio 1892 -... > Vol. 12 - carta 205

Datos del fragmento

Remitente JUAN BERDUNAUS Destinatario MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO Fecha 30 enero 1893 Lugar Desierto de las Palmas, Benicasim

Texto

Volumen 12 - carta nº 205

De JUAN BERDUNAUS
A MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO

Desierto de las Palmas, Benicasim, 30 enero 1893

[Efigie de Santa Teresa]
Haz lo que es en tí,
y déjame tú á Mí,
y no te inqiuetes por nada.
(Jesús á su Teresa)

Muy señor mio: Varias veces he tomado la pluma para escribirle y por creer título insuficiente la recomendacion de algunos amigos suyos y admiradores he desistido otras tantas, pero hoy sin mas título que mis deseos de ser ilustrado por su opinión acudo á V. confiado en su benevolencia.

Tiempo hace que el malogrado Muñoz Garnica en su docto «Ensayo biográfico de S. Juan de la Cruz», resucitó la opinión que borra del catálogo de las Obras del Doctor Extatico , el tratado que con el nombre de «Espinas del espiritu» corre impreso desde 1637, separado de las Obras del Santo aun en la edicion de Sevilla. Tradición es, entre los hijos del Santo, lo contrario de lo afirmado por el Sr. Muñoz Garnica; y del mismo parecer es el Sr. Carbonero y Sol que afirma rotundamente ser obra del Santo el tratado de las «Espinas».

Dificil es encontrar los manuscritos citados por el autor de la carta impresa á continuacion del mencionado tratado, pero como el Sr. Carbonero emite su juicio desde el punto de vista literario y se ratifica en su parecer sabiendo que asi es apreciado por los Carmelitas Descalzos en los primeros números de la Revista «San Juan de la Cruz» suplico á V. que tan entusiasta es por S. Juan de la Cruz como gloria literaria, se digne emitir su parecer sobre la filiación del referido tratado de las «Espinas del Espíritu» ya que frente á la opinion de los hijos del Santo, á la del Sr. Carbonero mientras explico Literatura en Sevilla y á la de personas peritas, se halla la del docto Sr. Muñoz Garnica, tan autorizado para emitir juicio sobre la vida y escritos de S. Juan de la Cruz mientras este permaneció en Andalucia.

Supongo á V. enterado de minuciosos detalles y por ello los omito, esperando de su bondad y amor á las investigaciones de esta naturaleza, se dignará ilustrar la opinion del menor de sus admiradores y hermano en Cristo

Juan Berdunaus
del S. C. de Jesús

 

Notas