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Epistolario > Volumen 9 (Noviembre 1887 -... > Vol. 9 - carta 347

Datos del fragmento

Remitente ANTONIO RUBIÓ Y LLUCH Destinatario MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO Fecha 16 octubre 1888 Lugar Barcelona

Texto

Volumen 9 - carta nº 347

De ANTONIO RUBIÓ Y LLUCH
A MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO

Barcelona, 16 octubre 1888

Carísimo Marcelino: aprovecho la oportunidad de regresar á esa corte nuestro buen amigo Cedrún para remitirte algunos papeles, que no encontraba ocasión de disponer para el correo, y darte al propio tiempo cuenta de mí persona y de mi cambio de domocilio. Tienes ahora una nueva casa en el Pasaje del Pont de la Parra, 5, piso 3.º, 2.ª, casi en el mismo lugar que ocupó la antigua biblioteca de San Juan que tanto frecuentaste. Si vuelves algun día á Barcelona y no hallas para obsequiarte un alcalde tan garboso como Rius y Taulet, mi nueva habitación es más que suficiente para albergarte. Tengo un cuarto de más, espacioso y no mal situado y un comedor anchuroso como pocos en Barcelona, (entre los que usa la gente de mi clase), donde cabrá perfectamente todo un apostolado de hijos y la fecunda vid de que habla David y que desea á todo afortunado padre, en torno de su mesa. En fin si vuelves tengo ánimo de tratarte mejor y hasta de obsequiarte con un té literario.

No estrañes mi diuturno silencio. Tu tambien le empleas conmigo con gran admiración de Alejandro Pidal á quien le parece me has de escribir todos los días. Tu tienes muchísimo que hacer; y yo sobre mis quehaceres, más penosos que los tuyos, me veo visitado por las plagas de Egipto propias de toda numerosa familia. Me he visto agobiado por enfermedades de amas y de chiquillos que son peores que las exigencias del editor más follón, y por la carga de un doble Jurado: el de la sección arqueológica de la Exposición, y del Certamen de diccionarios bio-bibliográficos de escritores catalanes. A todas esas calamidades se ha agregado la máxima y enojosa de cambio de piso, que me ha impedido en ocho días hacer cosa de provecho.

Es tanto el trabajo que me agobia que no sé por donde comenzar. Por esto al faltarme hoy valor para acometerle, me he determinado á escribirte.

Cedrún te entregará un artículo del Correo de las Aldeas en que hablo de tí como Dios me ha dado á entender. Si está mal, mi admiración y cariño por ti no lo saben hacer mejor. Ortiz quedó tan satisfecho de tus elogios que me escribió conmovido una carta de gratitud, suplicándome hiciera llegar sus sentimientos hasta tu insigne persona. Caro no me dice una palabra hace un año. Me paga puntualmente y nada más.

En los artículos sobre literatura catalana no hallarás nada nuevo; pero te los remito porqué tienen más sabor literario. Mis demás artículos relativos á la Exposición, á las fiestas de Barcelona, á la cuestión romana etc. me doy vergüenza de mostrártelos. Me admiro de que aquella gente aguante mis esperpentos y temo que de un día a otro han de venirme las dimisorias.

Este verano he continuado mis trabajos, comenzados en el anterior, para formar un diccionario de escritores en lengua catalana, donde tengan cabida los de Cataluña, Valencia, Mallorca, Rosellón y Alguer.

Hace pocos dias abracé al amigo Costa convertido ya en sacerdote.

La Nación de Bogotá publicó con elogios tu discurso de los Jochs Florals , traducido por mi de la trad. catalana. No me mandaron más que un ejemplar, pero reclamaré otro. Entérame de tus proyectos y trabajos.

Tuyo siempre,

Antonio

 

Notas