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Epistolario > Volumen 8 (Julio 1886 -... > Vol. 8 - carta 5

Datos del fragmento

Remitente JUAN VALERA Destinatario MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO Fecha 1 julio 1886 Lugar Bruselas

Texto

Volumen 8 - carta nº 5

De JUAN VALERA
A MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO

Bruselas, 1 julio 1886

Queridísimo amigo Menéndez: Con mucho gusto recibí anoche la carta de Vd. del 27. Como veo por ella que se va a Santander, a Santander le escribo.

He leído el artículo de Clarín en mi elogio, y verdaderamente no sé cómo agradecerle tanta bondad y generosidad, poco o nada común entre nuestros literatos.

De quienes nosotros podemos esperar aplausos, dinero y todo es de los ingleses de todas las regiones de la tierra. Si hiciésemos mejor el comercio de libros, si escribiésemos menos tonterías y más castizamente , esto es, siguiendo nuestro sentir y entender y creer, propio de nuestra casta, y si los libros se imprimiesen bien y sin erratas, yo doy por evidente que los ingleses se aficionarían a nuestras cosas hasta con furor y serían más público nuestro que los mismos españoles.

Digo todo esto en vista de lo que me han elogiado en todo país anglo-parlante cuando han llegado a leer algo mío. De nadie he recibido mayores pruebas de entusiasta simpatía que de ingleses de la metrópoli o de colonias. No puede Vd. calcular los elogios que me han hecho Rossell Lowell, Howells y otros muchos. Pocos días ha recibí el número de The Argus del 24 de abril (periódico que se publica en Melbourne, Australia), donde vienen tres columnas de alabanzas frenéticas, pero discretas, a Pepita Jiménez . Jamás elogió nadie aquella novela como el australiano la elogia. Todo esto, repitiendo yo la expresión de Vd. a propósito de la América española, no debiéramos echarlo en saco roto. Para volver a ser en lo político, guerrero, etc, potencia de primer orden, necesitamos dinero, ejército, marina, buen gobierno, etc.; para ser potencia de primer orden en letras, para volver a compartir la hegemonía del pensamiento con Alemania, Francia e Italia, no nos falta más que sacudir la pereza y ser reflexivamente atrevidos con la conciencia del propio valer.

Hay una quinta nación en Europa que se diría que va a entrar ahora en esta tetrarquía y la quiere convertir en pentarquía; pero yo creo que los Tolstois, Turguenefs, Lermontoff, Puschine, etc., distan aún mucho de alcanzar tan elevado puesto para su patria.

En fin, ya otro día escribiré a Vd. largamente sobre este punto y sobre otros. Hoy no puedo extenderme más. Deseo que haya encontrado Vd. bien a los de su familia y que aproveche bien el veraneo. La Historia de la Estética es preciosa.

Créame usted su afmo. y buen amigo

J. Valera

 

Valera-Menéndez Pelayo, p. 276-277.

Notas