Volumen 5 - carta nº 13
De VICENTE SAMANIEGO
A MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO
Roma, 11 mayo 1881
Mi antiguo y distinguido compañero y amigo: Le sé á Vd. indulgente y por eso, aunque tan tardía, envio al condiscípulo de hace algunos años enhorabuena cordialísima y sincera por su brillante discurso de recepcion en la Academia, por la merecida pero insigne honra, por la ovacion que tirios y troyanos le tributaron en la prensa.
Sirva de disculpa á mi retraso en cumplir este grato deber, la distancia que nos separa y el mal estado de mi salud, más delicada aun á raiz del acontecimiento literario, y no aumente Vd. mi sentimiento dejando para mañana el remitirme por la estafeta del Ministerio un ejemplar de su elegante y bien meditado trabajo.
Hace un mes he pasado al mundo negro, como aquí dan en llamarle, á la Embajada cerca de S.S., y en ella me tiene Vd., como Secretario, siempre dispuesto á complacer al ayer colega en los duros pero honrosos bancos de esa escuela, y maestro en ella hoy para satisfaccion de todos y orgullo de sus condiscípulos y buenos amigos.
Venga Vd. á hacerme una visita, y no obstante conocer muy bien estas ruinas y estos monumentos, juntos recordaremos, con los tiempos escolares, algo de lo que cerca uno del otro escuchamos a los amables profesores de la Escuela especial de Diplomática. Hasta la vista, pues, y no olvide Vd. tiene en el palacio de España, que Vd. conoce, un antiguo compañero y un admirador, que con el mayor afecto le estrecha la mano,
Vicente Samaniego