Traducciones ocasionales.
I. TÁMARA, Francisco.—Valencia, 1774.
En su traducción de los Oficios y Diálogos de Cicerón, última edición. Valencia, 1774.
Pág. 301. Libro De Senectute, cap. III.
«Plantan y ponen árboles, cuyo fructo no han de ver en su vida, ansí como dice nuestro amigo Stacio en una comedia que llama Sinephebis. Quando le fuere preguntado al labrador, por muy viejo que sea, para quién siembra, no dude responder: «Para nuestro Dios Inmortal, el qual quiso que no solamente recibiesse estas cosas de los antepasados, mas que las dejasse también a mis descendientes.. Mejor habló aquí Stacio Cecilio del viejo que trabaja para el siglo venidero, que no quando dixo:
«También por ventura vee muchas buenas cosas de las que quiere, y en la mocedad muchas veces le suceden cosas que no quería. Y aun más vicioso es aquello que dixo el mesmo Stacio:
(Al margen: «La comedia Sinefebis, tiene nombre de dos mancebos, que salidos ya de la mocedad comenzavan a barvar.»)
II. VALBUENA, Manuel.—Madrid, 1788.
En su traducción del Diálogo de Cicerón sobre La Vejez (2.ª ed., 1788), caps. VII y VIII, pp. 22-24.
dice Estacio en su comedia Synephebis.
(Serit arbores, quae alteri seculo prossint.)
«Mejor habló aquí Cecilio de un viejo prudente de lo venidero, que quando dixo:
«Y acaso también muchas cosas que quiere; y de las que no quiere, suele tener la culpa la juventud. Mas peor dixo lo siguiente:
Nada hai en la vejez más miserable,
Que el saber que uno es enfadoso a todos.
Aedepol, senectus, si nihil quidquam aliud vitii
Apportes tecum, quum advenis, unum id sat est;
Quod diu vivendo, multa quae non vult, videt...
Tum equidem in senecta hoc depuuo miserrimum
Sentire eâ aetate esse se odiosum alteri.