Buscar: en esta colección | en esta obra
Obras completas de Menéndez... > BIBLIOTECA DE TRADUCTORES... > II : (DOMENECH-LLODRÁ) > GUZMÁN, VASCO DE

Datos del fragmento

Texto

[p. 203]

Arcediano de Toledo y predicador notable. A ruegos de su ilustre pariente Fernán Pérez de Guzmán, señor de Batres, llevó a feliz término la traducción siguiente:

Manuscrito X-129 de la Biblioteca Nacional. Códice en 4.º en papel, los títulos de los capítulos de letra encarnada.

Aquí comienza el libro llamado Salustio, que fabla de los fechos romanos que acaescieron en los tiempos que Roma comenzó la su gloriosa fama, y comienza luego la Conjuración de Catilina y en el principio deste libro comienza el prólogo que se dirige a Fernán Pérez de Guzmán.

«Segund dize S. Gerónimo los ingenios pequennos no sufren grandes materias, e como quier que lo entiendo comenzar aquí a ruego et afincamiento de ti Fernán Pérez de Guzmán, caballero noble y zelador de saber los grandes e antiguos fechos por la sabiduría de los cuales el entendimiento de los que con derecha voluntad estudian de acrescentar el bien público así es avissado, a mi rudo et non prático de los fechos sea grave por aver de fazer aquello que a mi péndola abasta, al qual convenia antes con Xeremías dezir: «Señor Dios, no sé fablar, ca mozo so que non oso ofrecerme a complir mandamiento.» Pero confiando en aquel que las lenguas de los mudos faze bien fabladas e aquel que los labrios de la sin razón asna abrió, que abrirá a mí el entendimiento para que pueda acabar lo que entiendo escrebir a su servicio. Usando a manera de niño o tartamudo, los cuales quieren e cobdiçan fablar lo que oyen, aunque non puedan formar la palabra acabadamente. Aviendo esso mesmo fiucia que parte de los yerros que aquí fueren tomará en cargo tu nobleza, o para los enmendar o para los defender de las saetas de los que non saben si non mal fablar a los cuales cuanto de mi parte es una palabra de un viejo poeta pongo delante que dize «dejen de mal decir porque non se conozcan sus malos fechos», ca si yo en poco tengo ser judgado de los que dizen el mal bien v el bien mal, segunt lo dize S. Pablo, pero todavía someto mi obra al sesso e juicio de los más entendidos aparejado como S. Agustín dize a ser ensennado de chiquillo de un año. Ca tu sabes bien, varón [p. 204] noble que si tus ruegos cesaran non ficiera mover la péndola folgada, pues sabía que a enfermos miembros aun carga ligera es grave, pero non te pude negar lo que mi flaqueza pudiesse. Rescebirán por ende tú e los que leerán la voluntad con que se fizo, más que la obra enojosa non en sí mas por mengua del transladador.»

Al principio hay un índice incompleto de los capítulos de Jugurta.

Prólogo segundo, de Salustio: «Todos los omes que quieren valer más que las otras alimañas deben se esforzar a fazer algo porque la su vida non passe sin fazanna, en silencio, assí como las bestias fazen, a las quales la natura formó subjetas a obedescer al vientre», etc., etc.

Transcribiremos el índice de los capítulos de la Catilinaria «Cap. 1.º Que fabla del linaie e costumbres de Lucio Catilina. Cap. 2.º Cómo Roma fué poblada e de quales gentes, Cap. 3.º Que fabla de las virtudes de los nobles varones de Roma. Cap. 4.º Que fabla cómo los grandes fechos son tanto ensalzados quanto han grandes ingenios de scriptores. Cap. 5.º Que fabla cómo se pierde la república por las malas costumbres de los que la rigen e cómo ovieron comienzo de Silla. Cap. 6.º Que fabla de los vicios en que pecaron los romanos, Cap. 7.º En que cuenta las grandes maldades de los Romanos. Cap. 8.º que fabla de cómo pensó Catilina de señorear la ciudad e comenzó a ayuntar a su compañía mancebos malfechores. Cap. 9.º Que fabla de las muy grandes maldades de Catilina e de su vida sucia, Cap. 10. Que fabla de la conjuración de Catilina e los sus aliados para la cossa pública. Cap. 11. Que fabla de cómo fueron llamados ciertos nobles para la conjuración, esso mesmo muchos de fuera de la cibdad. Cap. 12. Que fabla de cómo estaba concertado de matar en el Capitholio muchos senadores e a los cónsules, e non se acabó, Cap. 13. Que fabla de cómo Catilina les señaló lo que cada uno habría si se acabasse lo que tenía pensado. Cap. 14. De cómo Catilina prometió a cada uno los galardones que había de haber si acabassen lo que era comenzado. Cap. 15. Cómo se cree que Catilina dió a beber la sangre de un ome a todos los conjurados. Cap. 16. Que fabla de cómo una mujer descubrió la conjuración. Cap. 17. De cómo eligieron en Roma a Cícero e Antonio por cónsules contra [p. 205] Catilina. Cap. 18. De cómo Catilina ponía asechanzas a Cícero e de cómo non lo pudo acabar. Cap. 19. De como Catilina volvió a poner asechanzas al cónsul e lo descubrió Curio. Cap. 20. De cómo a los cónsules fué acrescentado el poder para que pudiessen juzgar e mandar en cada cossa. Cap. 21. De cómo ordenaron su hueste contra Catilina. Cap. 22. De cómo en el Senado dieron gritos contra Catilina e de la grande turbación que ovieron todos. Cap. 23. Del desimular e de cómo non le valían nada sus engannos. Cap. 24. De una epístola de Catilina. Cap. 25. De la dureza de los conjurados. Cap. 26. De las diferencias e poca concordia de los romanos. Cap. 27. De cómo los Allobroges descubrieron el trato al cónsul e de lo que les mandó. Cap. 28. De cómo los de Catilina se iban sin buen consejo en ciertas provincias. Cap. 29. De cómo los Allobroges engannaron a los conjurados. Cap. 30. De lo que escribió Léntulo a Catilina. Cap. 31. Cómo fué preso Vulturgo. Cap. 32. Cómo claramente se manifestó en público quiénes eran los conjurados. Cap. 33. De cómo dijeron aquestos omes de los conjurados. Cap. 34. De cómo Tarquino dijo que Crasso era en la conjuración e non se creyó. Cap. 35. De cómo se averiguó todavía non ser verdad que Crasso fuesse de los conjurados. Cap. 36. De la oración que el César fizo en el Senado por los pressos, Cap. 37. De cómo acabando el César su oración fabló Caton. Cap. 38. De la oración que Caton hizo contra los pressos; Cap. 39. De cómo todo el senado alabó a Caton e otorgaron con él. Cap. 40. De la comparación que Salustio faze entre Caton e César. Cap. 41. De la justicia que fué fecha en los presos patricidas, Cap. 42. De cómo Catilina ordenó la batalla a Antonio. Cap. 43. De la oración e amonestamiento de Catilina a los de su hueste e de cómo fué vencido e muerto. Cap. 44. De cómo pelearon Catilina e los suyos. Cap. 45. De cómo peleó Marco Petreyo a Antonio contra Catilina. Cap. 46. Cómo Catilina fué desbaratado en la batalla e murió. Cap. 47. De cómo se acaba la conjuración de Catilina e comienza Jugurta.» Etc., etc. Sigue el texto de la Jugurtina. Por estar rota la última hoja falta la suscripción final en que constaría el año de la versión y el nombre del impresor.

El Infante Don Gabriel (o más bien Pérez Bayer, autor, según toda probabilidad, de la excelente traducción de Salustio que lleva el nombre del primero) cita como muy rara esta traducción de Vasco de Guzmán refiriéndose al códice del Escorial, [p. 206] señalado hoy: g-iij-II. Al mismo se refiere el señor Amador de los Ríos. Pero como se ve, existe por lo menos otra copia entre los mss. de la Biblioteca Nacional.

Asegura el Infante Don Gabriel que Francisco Vidal de Noya se apropió la versión de Vasco de Guzmán, pero esto no es exacto. El maestro del Rey Católico tuvo a la vista el trabajo de su antecesor, pero hizo una traducción nueva y casi siempre más fiel y ajustada al texto latino.

Santander, 29 de noviembre de 1875.

Notas