Hernández se codeó con lo más granado de la intelectualidad de la época, fuera científica o no. Entre sus amistades figuran personalidades de gran nivel científico, técnico y artístico: Andrés Vesalio (1514-1565), Juanelo Turriano (1500-1585), Juan de Herrera (ca. 1530-1597) o Benito Arias Montano (1527-1598). Tradujo y comentó la <i>Historia natural</i> de Plinio el Viejo, donde se nos muestra como un auténtico sabio renacentista conocedor, obviamente, de la medicina, pero también de la botánica, zoología, mineralogía, geología, cosmografía, lenguas clásicas, etc. Además, como científico moderno que fue, discute la supuestamente infalible autoridad de los sabios de la Antigüedad. Quizá por todo ello, el monarca español eligió al de La Puebla como director de la expedición que se iba a ocupar del estudio de la naturaleza de Nueva España. Hernández describió 230 especies de aves, pero la falta de ilustraciones, que se perdieron, hace su identificación muy difícil. Hernández citó de forma sistemática los nombres en náhuatl a partir de los cuales es posible clasificar las aves en su obra <i>Rerum medicarum Novae Hispaniae Thesaurus, seu Plantarum, Animalium, Mineralium Mexicanorum Historia cum notis Joannis Terentii Lineæi</i> [Tesoro de las cosas Médicas de la Nueva España o de las Plantas, Animales y Minerales de los Mexicanos...]. Hernández murió sin ver publicada su obra. Fue en 1648 cuando se completó la edición gracias al empeño del embajador de Felipe IV en Italia, Alfonso Turriano. El padre Juan Eusebio Nieremberg usó los dibujos de Hernández al preparar su obra <i>Historia Naturae Maxime Peregrine</i> [Historia de la naturaleza en extremo peregrina], publicada en Amberes en 1635. Pero no fue hasta 1790 cuando se publicó en Madrid la gran obra hernandina que lleva por título <i>Francisci Hernandi... Opera cum edita, tum inedita, ad autographi fidem et integritatem expressa</i> [De Francisco Hernández... obras, tanto editadas como inéditas, sacadas íntegras y con arreglo a lo escrito por el autor], pero tampoco están en ella recogidos todos sus trabajos. La edición príncipe de su obra, por la Accademia dei Lincei, tuvo que salvar el escollo del propio Galileo, que pertenecía a esa institución, y que no creía posibles tales descubrimientos.
Resumen biográfico extraído de Wikipedia en español: <blockquote>"Francisco Hernández de Toledo o Francisco Hernández de Boncalo ( ca. 1514 a 1517, La Puebla de Montalbán, Toledo, España - 28 de enero 1587 en Madrid) fue un médico, ornitólogo y botánico español."</blockquote>
Abstract from English Wikipedia: <blockquote>"Francisco Hernández de Toledo (La Puebla de Montalbán, Toledo 1514 - Madrid 28 January 1587) was a naturalist and court physician to the King of Spain. Hernández was among the first wave of Spanish Renaissance physicians practicing according to the revived principles formulated by Hippocrates, Galen and Avicenna. Hernández studied medicine and botany at the University of Alcalá and may have traveled between cities in Spain, as it was common among physicians seeking to make a name for themselves. Moving from Seville with his wife and children, Hernández served briefly in the Hospital y Monasterio de Guadalupe and then at the Hospital Mendoza in Toledo, where he gained prominence for his studies of medicinal botany and publication of a Castilian translation of a work on natural history by Pliny the Elder. In 1567 Hernández became a personal physician to King Philip II."</blockquote>